Desde el 20 de septiembre se registran protestas en el centro de Charlotte. Foto: AFP
Las autoridades de Charlotte levantaron el 25 de septiembre el toque de queda decretado en las últimas noches debido a las violentas manifestaciones habidas en esa ciudad de Carolina del Norte (EE.UU.) por la muerte de un afroamericano a manos de la policÃa.
La alcaldesa de la ciudad, Jennifer Roberts, y el presidente de la comisión del condado, Trevor Fuller, hicieron el anuncio, que tendrá efecto inmediato, por lo que a medianoche (04:00 GMT del lunes) no entrará en vigor la medida, como ocurrÃa desde el viernes.
“La alcaldesa Roberts sigue instando a la comunidad a reconciliarse y demostrar su unidad de una manera legal y pacÃfica, reza el comunicado a través del cual se hizo el anuncio.
Pese al toque de queda, que duraba hasta las 06:00, en los últimos dÃas cientos de personas mantuvieron sus protestas en las calles más allá de la medianoche, sin que se repitiesen los disturbios y enfrentamientos con la policÃa de los primeros dÃas.
Desde el 20 de septiembre se registran protestas en el centro de Charlotte, conocido como “Uptown”, que en las primeras jornadas fueron violentas, debido a la muerte de Keith Lamont Scott, un afroamericano de 43 años tiroteado ese dÃa por la PolicÃa.
En los altercados del miércoles una docena de agentes de la policÃa resultaron lesionados, mientras que el jueves uno de los manifestantes murió de un disparo en la cabeza, lo que provocó el toque de queda y la activación de la Guardia Nacional para controlar la violencia.
Las autoridades han divulgado los vÃdeos de las cámaras de los agentes involucrados, en los que se ve cómo murió abatido Scott, pero no se puede apreciar si llevaba un armas, como dice la PolicÃa.
Los familiares de la vÃctima niegan que Scott fuera armado, pero la PolicÃa insiste en lo contrario y dice que en el lugar se recogió una pistola y una funda para llevar en el tobillo, y que tenÃa huellas y ADN que se corresponden con las de la vÃctima.
La publicación de los vÃdeos era una de las principales demandas de los manifestantes, que han ido calmándose en los últimos dÃas.