Washington, AFP
La cooperación de los dos mayores contaminantes del planeta, Estados Unidos y China, es crucial para establecer una respuesta mundial a la amenaza del calentamiento climático, aseguraron esta semana senadores estadounidenses.
“Washington y Pekin deberán inevitablemente dar el ejemplo”, declaró el demócrata John Kerry, durante una audiencia de la comisión de Asuntos Extranjeros del Senado, la cual preside.
Estados Unidos ha sido históricamente el mayor emisor de gases de efecto invernadero, pero China lo ha superado recientemente, y estos dos países son responsables de cerca de la mitad de las emisiones de CO2 del planeta, indicó el senador de Massachusetts (noreste) , recién llegado de Pekín.
“O (Estados Unidos y China) crean juntos el impulso necesario para asegurar una respuesta mundial o correremos el riesgo de una catástrofe planetaria”, advirtió el ex candidato a la presidencia.
“Mi mensaje a los chinos fue simple: Estados Unidos entiende que tiene una obligación de liderazgo, pero ustedes deben comprender que, políticamente, no se adherirá a un tratado internacional sobre el clima sin un compromiso real de China”, dijo en referencia a la conferencia de la ONU sobre el clima prevista para diciembre en Copenhague.
Optimista, consideró sin embargo que Pekín está listo a comprometerse en la vía de las energías verdes y a desempeñar un papel constructivo en las próximas negociaciones.
Por su parte, el número dos de la comisión de Asuntos Exteriores, el republicano Dick Lugar, consideró que “el debate en Estados Unidos será profundamente influido por la percepción de una voluntad de China a comprometerse a limitar sus emisiones” , dijo el senador de Indiana (norte) .
Para Ken Lieberthal, experto del Brookings Institution, Washington y Pekín deben asociarse para promover energías verdes, aunque, según él, China “se negará a comprometerse a un tope de sus emisiones de CO2”.
“China y los otros países en desarrollo no tienen que adoptar las mismas medidas que los países desarrollados, pero deben tomar medidas significativas por las cuales se comprometan a nivel internacional y que sean calculadas y suficientemente ambiciosas”, dijo el miércoles el enviado estadounidense para el cambio climático Todd Stern, que viaja a China este sábado.
El Congreso estadounidense estudia un proyecto de ley para reducir de aquí a 2020 de 17% las emisiones de gases de efecto invernadero con respecto a su nivel de 2005.
El presidente estadounidense Barack Obama prometió combatir el cambio climático. Su antecesor había rechazado el protocolo de Kioto con el argumento de que no imponía ninguna reducción a los países en desarrollo.
China, que depende en un 70% del carbón para su energía, emite cuatro veces más gases de efecto invernadero por cada punto de crecimiento económico, y seis veces más que Europa o Japón.