Entrevista a Sandro Vaca, sismólogo del Instituto Geofísico.
¿La reactivación del volcán Tungurahua es un fenómeno normal?
Diríamos que son normales las erupciones considerando la historia geológica de los volcanes y, además, por la geodinámica en que se encuentra el Ecuador. Tenemos que referirnos a las placas tectónicas donde la placa de Nazca se está introduciendo debajo de la placa Continental y es la fuente para la generación de los magmas (roca fundida que contiene gases) que originan las erupciones.
¿El proceso eruptivo del Tungurahua se mantendrá de manera moderada o puede tornarse violenta?De las evidencias históricas y geológicas que se tienen ha habido erupciones violentas en el pasado, eso se puede evidenciar en los depósitos de flujo piroclástico (mezcla caliente de gases, ceniza y fragmentos de roca) que han bajado hasta las zonas pobladas, por ejemplo, en Bascún, cerca de Baños. Eso indica que las erupciones violentas del pasado pueden volver a ocurrir.
¿Las erupciones del Tungurahua van a continuar?
El proceso eruptivo moderado del Tungurahua va a continuar. ¿Hasta cuándo? No lo podemos determinar. Todo depende de las condiciones internas, si sigue habiendo una alimentación al magma la actividad va a continuar, pero si cesa, entonces va a parar la actividad eruptiva.
¿De dónde proviene esa alimentación?
La alimentación de los magmas se produce en el interior de los volcanes y proviene del movimiento de las placas tectónicas.
¿Las poblaciones que viven al pie del volcán deben acostumbrarse a las explosiones?
Más que acostumbrarse, deberíamos elaborar planes para determinar las zonas de mayor riesgo o peligro por las erupciones del volcán. El Instituto Geofísico (IG) tiene establecido un mapa de amenazas del Tungurahua. Bajo esta premisa, las autoridades deberían impedir que se sigan poblando las zonas de mayor riesgo. En el pasado se formaron poblados por desconocimiento de los riesgos de las erupciones, no había estudios ni investigaciones, ahora ya hay estudios del IG que advierten de los riesgos de vivir en las faldas del Tungurahua.
¿Cuál es el volcán más activo en el Ecuador?
El Sangay, ubicado en la provincia de Morona Santiago, es el volcán más activo del país. La actividad de ese volcán se ha mantenido desde 1930. Ha estado en un proceso eruptivo con flujos de lava (magma), flujo piroclástico, material incandescente. Pero el riesgo de ese volcán es casi nulo, porque a su alrededor no hay presencia humana.
¿Los volcanes tienen una conexión entre sí?
No, los volcanes son entes independientes, con un comportamiento individual. No tiene conexión entre ellos.
¿El volcán Guagua Pichincha puede reactivarse?
La situación del vocal es normal. En sus faldas tenemos instalada una red sísmica y recibimos la información de la actividad sísmica en tiempo real. Si hay movimientos internos en el volcán, inmediatamente los registramos en el sismógrafo. En el momento, el volcán mantiene una actividad mínima con temperaturas bajas en la parte del cráter, aun cuando se pueden ver fumarolas que en ocasiones aumentan, pero básicamente debido a la actividad freática (explosión de vapor).
¿Qué información hay sobre el volcán Cotopaxi?
El Cotopaxi es uno de los volcanes más peligrosos que tenemos en el Ecuador. Esto radica, básicamente, a que en el pasado ha presentado una actividad explosiva violenta con la generación de flujos piroclásticos que descendieron por los flancos del volcán y derritieron muy rápidamente el casquete glacial y produjeron grandes lahares (flujos de lodo) que afectaron a las zonas pobladas alrededor del volcán.
¿Pero hay amenaza de una erupción del Cotopaxi?
La situación del volcán es normal. A finales del 2001 hubo un incremento de la actividad, luego descendió paulatinamente. Desde ese período, la actividad se ha mantenido más o menos estable. Con el monitoreo que realizamos podemos anticiparnos a advertir un eventual proceso eruptivo.
¿Qué debe hacerse para que la población esté preparada ante la amenaza de erupciones volcánicas?
En todo el mundo hay poca información a la población no solo de las erupciones volcánicas sino sobre otros fenómenos naturales, como inundaciones, sequías, huracanes, sismos’ Si uno conoce la amenaza que representa un fenómeno natural, se la puede afrontar de mejor manera. Las autoridades deben educar y concienciar a la población de los peligros de un fenómeno natural. Conocer el comportamiento de un volcán es conocer la amenaza que es permanente y eso nos va a ayudar a tener un mejor desempeño cuando entre en actividad.