Le gustaba tanto la música, que dejarla no entraba como una opción. Paul McCartney intuyó que luego de 12 álbumes y 22 sencillos producidos con Los Beatles, su ingenio de compositor musical permanecía intacto.
Sin embargo, pararse en un escenario como solista y bajo la sombra de una de las bandas más emblemáticas de los años 60 no sería una tarea fácil.
En 1972, tres años después de que ‘Los cuatro de Liverpool’ se reunieron en el techo de Apple Records para tocar por última vez como banda, McCartney reapareció al frente de la banda Wings para tocar en vivo frente a unas 700 personas, en la Universidad de Nottingham. Ese fue el primero de 11 shows ‘improvisados’ que el inglés ofreció en campus universitarios del Reino Unido.
De las universidades, McCartney retomó el ritmo que la calidad y popularidad de sus nuevas canciones le exigía.
La era de Wings terminó con al menos 143 conciertos en cinco tours, de los cuales solo 40 shows sobrepasaron las fronteras de Europa. En la última gira con el grupo Wings (1979), el músico y compositor volvió a interpretar algunas canciones de los Beatles.
Tras la muerte de John Lennon, McCartney se autoexilió de los escenarios aunque no dejó de componer.
Una década después de su última gira, el ex Beatle armó una banda con su esposa Linda McCartney y los músicos Hamish Stuart, Robbie McIntosh, Paul Wickens y Chris Whitten para iniciar la segunda era McCartney sobre los escenarios.
Entre las 13 giras musicales como solista, Paul McCartney ha ofrecido 460 espectáculos en vivo. A estos se sumarán las 14 fechas confirmadas en su última gira mundial ‘Out there!’, que iniciará su sexta etapa el próximo 19 de abril con una presentación en el Estadio Centenario de Uruguay, para seguir por Chile y Perú antes de llegar al Ecuador, el 28.