Si se tiene capacidad y honestidad, que nunca deben faltar en un árbitro, no hay motivo para buscarse una designación. Así respondió a las críticas el cuencano José Carpio, quien pitará la primera final del campeonato nacional de fútbol 2011 entre Emelec y Deportivo Quito. El juego será este domingo, a las 16:00, en el estadio Capwell de Guayaquil.
De los 44 partidos del 2011, Carpio dirigió un total de 22 y en seis cotejos actuó como cuatro árbitro. El réferi de 45 años sostiene que su designación se debe a la regularidad y porque no fue suspendido ninguna fecha por mala calificación. Eso motivó la confianza de la Comisión Nacional de Arbitraje.
Carpio debutó como árbitro de primera categoría en 1995. En 1997 se estrenó como réferi con escarapela FIFA y se mantuvo, sin interrupciones, hasta el 2008. Ese año dejó de ser réferi internacional por su edad, 42 años, puesto que la Confederación Sudamericana de Fútbol empezó un proyecto de renovación en el arbitraje.
El juez reconoció que no es un encuentro más. “Será el último partido de mi carrera arbitral y como tal será especial. La responsabilidad es mayor y hay mucha expectativa”. El se graduó como árbitro en 1988 y en su primera fase pitó partidos juveniles y de Segunda Categoría.
Sobre las críticas de la prensa guayaquileña, Carpio dijo las mismas hieren cuando se toca el plano personal. Sin embargo, “sabemos de quién y de dónde vienen. Hay gente de los medios de comunicación que también trabaja con la parte interesada. Eso no es ético”.
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