Fue el día de los abrazos y felicitaciones en la Universidad Católica. Ayer, el plantel y el cuerpo técnico se reunieron en el complejo de la Armenia con la alegría de saber que su matrícula para el 2013 en la Serie A ya está aprobada.
La ‘Chatoleí’ volverá a los dos años a la Primera, de la mano del DT argentino Jorge Célico, en un logro que tuvo un festejo distinto porque su ascenso se selló en otra cancha y sin estar presentes.
Célico conoció del ascenso por las redes sociales y los jugadores se contaron la noticia por mensajes de texto. Ocurrió el domingo pasado, cuando ya todos estuvieron en sus domicilios.
Ayer, se volvieron a juntar para contar sus anécdotas sobre cómo se enteraron y empezaron a hablar del futuro. En la charla del camerino, antes de la práctica, entre el cuerpo técnico y los jugadores se insistió en que el primer objetivo de ascender está cumplido. Falta el otro: ser campeones.
Esa será la consolidación del proyecto que empezó en noviembre del 2010 tras una reunión entre Célico y Francisco Egas, presidente del club. El propósito era tener una base de jugadores jóvenes y que sean propios del club.
El reto se planteó cuando la ‘Chatoleí’ descendió, el 2010, y Célico era confirmado como entrenador, luego de un año de fracasos en lo futbolístico.
Oswaldo Paredes, gerente del club, dice que los descensos del 2008 y del 2010 dejaron lecciones. “Con la experiencia de los otros años, ahora queremos mantener a la mayoría del equipo. Trataremos de que no salgan jugadores y sumar unos tres o cuatro más”. No quieren ser catalogados como equipo ascensor.
La dirigencia aún no se ha sentado a planificar el 2013, pero ya calculan que el presupuesto superará los USD 2 millones con el objetivo de asentarse en la Serie A con un plantel joven. Este año les costó más de USD 1 millón.
Las experiencias anteriores no fueron las mejores. Usualmente luego de subir a la Serie A se renovaba el plantel y eso afectaba el proyecto con lecciones duras y un desfile de entrenadores.
Ahora hay la propuesta para que todos los jugadores se queden. La primera medida es confirmar al cuerpo técnico encabezado por Célico. Esto también incluye a los jugadores extranjeros, según el gerente del ‘Trencito’.
Eso también se conversó antes de la práctica entre el cuerpo técnico, los futbolistas y el gerente, en representación de la dirigencia. En el camerino hubo aplausos porque hubo el compromiso de pagarles lo más pronto el sueldo mensual que les adeudan.
Hasta el momento solo les han pagado el dinero por los partidos ganados como visitantes en el hexagonal, pero el premio económico del ascenso será repartido a mediados de diciembre. Los valores se manejan en secreto.
¿Cuál ha sido el éxito del proyecto? El uruguayo Fernando López cree que se logró afianzar con la base de los juveniles, con un promedio de edad de 22,2 años.
El ‘Zurdo’, como se identifica al volante, lo toma como una revancha el volver a participar en un ascenso con un club ecuatoriano. “Cuando ascendí con Técnico Universitario fue duro porque llegó otro entrenador y no nos tomó en cuenta”. López estuvo el 2010 y el 2011 en Ambato.
La misma historia la vivió Diego Benítez, el otro uruguayo que pasó por el ‘Rodillo’. El delantero le hizo goles claves a la ‘Chatoleí’ que impidieron el ascenso en el 2011. Lo primero que hizo la dirigencia de Católica con el apoyo de Célico fue contratarlos como refuerzos para esta temporada.
Este año, con 13 tantos anotados en la ‘Chatoleí’, Benítez es el tercer goleador de la Serie B.
La cuota foránea la completan el golero argentino Israel Galíndez, de 25 años, y el volante Facundo Martínez, de 27.
Los festejos por el ascenso continuarán hoy luego del entrenamiento. Habrá parrillada en el complejo y una nueva reunión entre los jugadores y dirigentes.