El destino final de la carne era para Santo Domingo de los Tsáchilas y parte de Manabí.
Funcionarios de la Agencia de Regulación y Control Fitosanitario y agentes de la Policía Judicial decomisaron 440 kilos de carne de res y de cerdo que habían sido faenados en un camal clandestino y en un local que no tenía medidas sanitarias.
Esto fue detectado en operativos que se realizaron en los sectores La Bramadora y Unión Popular del cantón El Carmen, provincia de Manabí. Durante el operativo se evidenció que en el sitio de la faena los animales estaban en un piso de tierra, a lado de corrales y junto a neveras frigoríficas.
Al parecer, era una finca donde se realizaba esta actividad al margen de la ley. Según los investigadores, esto lo hacían en horas de la noche para evitar los controles. No obstante, hubo denuncias ciudadanas que impulsaron estas verificaciones.
Una persona que fue notificada por uno de los casos contó a los funcionarios que la carne era despachada para negocios de la tierra Tsáchila y también para el mercado del cantón El Carmen.
El infractor será sometido a un proceso administrativo para que responda por la falta de asepsia y por no movilizar las reses hacia uno de los camales formales de la zona.
En otro recorrido por El Carmen se encontró que en las afueras de una tercena se faenaban cerdos en el piso. El producto estaba listo para ser comercializado, según el parte policial.
Agrocalidad ofreció realizar más de estos operativos porque hay denuncias que dan cuenta de que en horas de la madrugada se acostumbra a despostar a las reses de forma irregular y en condiciones no aptas para el consumo humano.