La Intendencia de Policía de Azuay cerró sus puertas de atención al público. Los 14 funcionarios que allí laboraban fueron despedidos dentro del proceso de compra de renuncias que mantiene el Gobierno. Lo mismo ocurrió con otros 11 empleados del resto de cantones azuayos.
Según el Gobernador de Azuay, Humberto Cordero, la salida de estos funcionarios no tiene nada que ver con las denuncias registradas en las comisarías de Guayaquil.
No obstante, él aclaró de a partir del lunes la Intendencia no juzgará contravenciones, solo realizará prevención. La atención se retomará el lunes.