Perú, uno de los mayores productores mundiales de cocaína, designó como nuevo ‘zar’ antidrogas al exministro de Defensa del actual gobierno, Alberto Otárola, en reemplazo de Carmen Masías, informó el miércoles la gaceta oficial.
Otárola será el tercer presidente ejecutivo de la estatal Comisión Nacional para el Desarrollo y Vida sin Drogas (DEVIDA) en casi tres años de gestión del presidente Ollanta Humala, de quien es un estrecho colaborador.
Masías, una funcionaria con un perfil técnico y conocida activista antidrogas, renunció sorpresivamente al cargo que había asumido a fines de 2011.
La salida de Masías se produce en medio de prolongados esfuerzos de las autoridades peruanas por contrarrestar informes internacionales que señalan que Perú es el primer productor de coca, materia prima del clorhidrato de cocaína.
Cálculos de la agencia antidrogas de Estados Unidos (DEA) , que datan de enero 2014, señalan que Perú sería el primer productor de clorhidrato de cocaína, con unas 230 toneladas de esa droga al año.
A su vez, un informe de las Naciones Unidas, de setiembre 2013, indicó que Perú había superado a Colombia como primer productor mundial de hojas de coca pese a que, por primera vez en siete años, logró reducir los cultivos de 62.500 hectáreas en 2011 a 60.400 en 2012.
En enero pasado el gobierno peruano anunció que se propone erradicar 30.000 hectáreas de hoja de coca en 2014, como parte de su lucha contra el narcotráfico a la que destina unos 21 millones de dólares anuales.
Perú eliminó 23.600 hectáreas de cocales el 2013, superando la meta de 18.000 que se había trazado el gobierno, según cifras de DEVIDA de inicios de 2014.
Los mayores valles cocaleros de Perú, como el Valle de los Ríos Apurímac, Ene y Mantaro, en la selva central y sudeste del país, se han convertido en zonas de guerra entre las fuerzas de seguridad y las bandas de narcotraficantes que actúan en alianza con grupos remanentes de la guerrilla maoísta Sendero Luminoso, derrotada a mediados de los años 90.