El pico más alto de fallecimientos inusuales en Ecuador se registró en abril. Foto: REUTERS.
La mortalidad en el Ecuador sigue en escalada con un exceso de defunciones durante los cinco meses de pandemia de 25 519, por lo que es uno de los países más afectados de la Región junto con Perú y Brasil.
Si bien el pico más alto de fallecimientos inusuales sigue siendo abril por la mortandad que se vivió en Guayas, Manabí, Santa Elena y Los Ríos, de mayo a julio hay un promedio de 3 000 decesos excesivos mensuales.
A escala nacional, el Registro Civil reporta desde marzo hasta el 29 de este mes de julio un total de 55 925 defunciones, por lo que al comparar con el 2019 se evidencia un exceso de 25 519 decesos inusuales, que se pudieran atribuir a la nueva cepa del coronavirus (ver gráfico).
Para tener una idea más clara de este irregular incremento de muertes, de la suma de muertes de marzo a julio del 2019, la tasa de fallecidos por cada 100 000 habitantes fue de 176; mientras que en el mismo período de este año, el indicador se duplica a 319.
En estos cinco meses de pandemia, Guayas sigue siendo la que más concentra víctimas mortales irregulares con un total de 23 298, principalmente de Guayaquil, en donde fue el epicentro del virus. Hay que tomar en cuenta que esta provincia todavía ha registrado mortalidad inusual en junio y julio últimos.
Pero la cantidad global de fallecimientos irregulares de Guayas es cinco veces superior a lo que se ha registrado en Pichincha, que es la segunda provincia con más mortalidad hasta el momento, sobre todo, en Quito, la capital.
Tras ambas provincias continúan en número de afectados: Manabí, Santa Elena, El Oro, Los Ríos, que corresponden al Litoral ecuatoriano y, Tungurahua, de la Sierra.
Estas siete provincias concentran el 92% de las defunciones en exceso y, por tanto están entre las que más han experimentado la demanda de atención en sus centros hospitalarios.
Sin embargo, durante los dos últimos meses de junio y julio la provincia que más presión ha afrontado por atención sanitaria y servicios funerarios ha sido Pichincha y, específicamente, Quito.
Hay que resaltar, que de este grupo más afectado, Santa Elena no registra fallecidos irregulares en este julio.
Las cifras del Registro Civil muestran, además, que hay otras dos localidades que merecen mayor atención, pues en el período analizado hay una duplicación de sus muertos. Estas son: Santo Domingo y Sucumbíos.
Desde el 25 de mayo pasado, que los dos cantones de Santo Domingo se encuentran en semáforo amarillo, hasta este viernes 31 de julio del 2020, el número de contagiados de covid-19 se ha quintuplicado.
Cuatro cantones de Sucumbíos, en cambio, pasaron a amarillo, entre mayo y junio pasados. Pero si vemos los casos confirmados de la provincia, desde el 20 de mayo que Lago Agrio-el cantón con más infectados– pasó a este color, se han incrementado 13 veces, al pasar de 58 a 1 144.
De forma general, hay que esperar que el Registro Civil consolide sus cifras de julio, que incluyen los registros tardíos. Sin embargo, estos datos muestran una realidad muy distinta a la que reporta el Ministerio de Salud Pública en sus informes diarios.
Hasta este 31 de julio, la cartera de Estado confirmó 5 702 fallecidos por la enfermedad viral y 3 470 probables, por sus síntomas, por lo que la suma de ambas cifras es tres veces menos a las muertes excesivas que se evidencia en los últimos cinco meses de pandemia…
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