Los artistas españoles Joaquín Sabina y Joan Manuel Serrat se presentaron en Montevideo. Foto: AFP
Varios cantantes se han solidarizado con las protestas que los pueblos de América Latina están pasando en estos meses. En sus conciertos, los artistas mandan su voz de aliento y hacen una llamado a la calma.
El reguetonero colombiano J Balvin dijo, durante un concierto en Ciudad de México, un mensaje de apoyo a su país ante las protestas desatadas desde el jueves, 21 de noviembre del 2019, contra el presidente de Colombia, Iván Duque, aunque no se posicionó sobre el conflicto, informaron este domingo 24 de noviembre, medios locales.
“Hoy aprovecho para mandar un mensaje a mi tierra, a Colombia, que los quiero, que los amo, que estoy con ustedes y que estoy haciendo patria trabajando por un mejor futuro para nuestro país”, dijo J Balvin durante su actuación en el Coca-Cola Flow Fest de México.
Ante miles de asistentes, el reguetonero, nominado en la 62 edición de los Grammy, dijo que no se define “ni de izquierda ni de derecha” ya que “lo importante es ser derecho en la vida” y “no pasar por encima de nadie”.
“Yo no soy político, soy un hombre de bien, solamente con un mensaje de dignidad, de tolerancia, de amor“, expresó J Balvin, quien pidió al público mexicano que cantara muy fuerte para mandar “buena vibra” a Colombia.
Por su parte, Los artistas españoles Joaquín Sabina y Joan Manuel Serrat se presentaron el sábado 23 de noviembre del 2019, por tercera y última noche en este año en Montevideo, Uruguay, con un extenso espectáculo en el que reversionaron sus clásicos, lanzaron mensajes políticos y recordaron a figuras locales, en el marco de la gira “No hay dos sin tres” que los lleva por América Latina y España.
El tono enérgico de Sabina, de 70 años, y la debilitada voz de Serrat, de 75, entrelazaron canciones como “Y sin embargo” o “19 días y 500 noches” con “Hoy puede ser un gran día” y “Mediterráneo”.
Esta última dio pie a una crítica hacia la política migratoria europea, ya que el mar se ha convertido, dijo Sabina, en un lugar lleno de plástico y de cadáveres de migrantes a quienes “la cultísima Europa no dejaba entrar” .
Hace unos días atrás, la cantante chilena Mon Laferte sorprendió al mundo con un mensaje en su torso desnudo en la entrega de premios de los Latin Grammy. “Nada de lo que hago es por una pose, yo no sé hacer eso. Todo lo que sale de mí es auténtico y estoy dolida y preocupada por mi país”, aseguró la cantante.
Dice sentirse tranquila, porque logró lo que quería, y más todavía cuando sus padres, su hermana y su sobrina adolescente la calificaron de valiente.
Sigue medio incrédula con los comentarios que critican sus protestas en la alfombra y con el reguetón como una estrategia de mercadeo: “Si piensan que vendo mi pudor o mi arte, pues los que están muy mal son ellos”.
Las opiniones negativas, en especial las que se expresan a través de las redes sociales y de forma anónima, no le quitan el sueño.