Los choferes de la cooperativa Latina piden a la Policía que los ayuden a frenar los atracos violentos. Foto: Eduardo Terán / EL COMERCIO
Los dirigentes, choferes, ayudantes y azafatas de la cooperativa de transporte Latina viven con miedo porque, en los últimos 15 días, cinco unidades han sido asaltadas por bandas delictivas. La mañana de hoy, viernes 27 de septiembre del 2019, uno de sus dirigentes indicó que dos buses fueron atracados en el sector de La Floresta – Vicentina y tres en el sur, a pocas cuadras de llegar a su última parada en el sector de la Martha Bucaram de Roldós.
Un dirigente, que pidió la reserva de su identidad, cuenta que las bandas delictivas operan en horas de la noche porque su objetivo es llevarse el dinero que los conductores y controladores recaudan durante el día.
Indica que los delincuentes operan cerca de las 22:00 cuando los buses llegan a la parada La Merced, en el sector de la Martha Bucaram. Grupos de cuatro o cinco desconocidos se quedan en el último asiento y se aprovechan cuando las unidades circulan por zonas despobladas.
A las 20:30 del jueves 12 de septiembre, un chofer fue atracado en la parada de La Merced. Tres hombres le sorprendieron con cuchillos. Uno lo apuntó en el abdomen y le dijo que no hiciera ruido.
El conductor trató de acelerar, pero el delincuente le punzó más duro con el arma. “Mi ayudante es mi hermano y comenzó a pelear con los otros delincuentes, yo alcancé a lanzarle un codazo al que me amenazaba y logré salir a pedir ayuda a otros compañeros”.
Cuando retornó al lugar con sus otros choferes, los ladrones escaparon robándose USD 900 y la radio de comunicaciones de la unidad. “Llamamos a la Policía Nacional y llegó media hora después”, aseguró.
En otro caso, un bus fue asaltado a las 22:30 del lunes 23 de septiembre. “Se subieron por la puerta posterior luego de que se bajaron los pasajeros y los llevaron a una calle alejada. Con pistola amedrentaron al chofer y la azafata”, indicó el propietario de la unidad.
Se robaron celulares, el dinero de la caja y los equipos de radio comunicación.
En un tercer caso, la conductora Verónica (nombre protegido) fue asaltada mientras trabajaba a las 20:00 del lunes 16 de septiembre en la calle Ladrón de Guevara del barrio La Vicentina. Fue a pocos metros de la parada de los buses que se dirigen a la parroquia de Cumbayá.
Ese día, ella cubría la ruta Martha Bucaram – La Floresta. La mujer recuerda que quedaban solo cuatro personas en el bus, tres hombres de entre 25 y 30 años y una persona adulta mayor, quien se bajó del vehículo. De forma repentina, segundos después, los jóvenes las sorprendieron con armas blancas.
A la azafata le pusieron un puñal sobre el cuello, comenzaron a insultarla y le exigieron el dinero que recaudaron durante el día. A Verónica la amedrentaron con un cuchillo que le pusieron en las costillas. “Por suerte vestía una chompa gruesa del uniforme de la cooperativa y no me hirieron”, recordó. Les entregaron USD 35 y los celulares. No se llevaron todo el dinero de la caja porque lo guardaron en otro sitio.
Ante esta ola de delitos, los choferes piden a la Policía que los ayuden a frenar los atracos violentos. La preocupación es generalizada -acotó un dirigente de la cooperativa- porque se presentan las denuncias y “no pasa nada”.