Imagen referencial.Un ecuatoriano acusado del asesinato de dos mujeres en el 2012 fue detenido en Guatemala. Foto: Pxhere.
Las fuerzas de seguridad de Guatemala informaron este jueves 30 de mayo del 2019 de la captura de un ciudadano ecuatoriano que estaba entre los diez más buscados del país por ser el presunto responsable de un doble asesinato. El doble crimen ocurrió el 14 de julio del 2012 en la capital azuaya, en el sur del Ecuador.
El sospecho estaba en la lista de alerta roja de los más buscados por la Organización Internacional de Policía Criminal (Interpol) porque se conocía que tras los hechos salió del Ecuador. La Policía Internacional lo detuvo en Guatemala durante un operativo realizado por personal de la División de Policía Internacional frente al Complejo Departamental de Justicia del departamento de Huehuetenango.
En ese país se había cambiado de apellido, pero al analizar su rostro con la de las fotos que tenía la Interpol se constató que era la misma persona. Ángel Rodolfo, de 38 años, fue puesto a órdenes de la justicia de Guatemala para iniciar el proceso de deportación.
Su detención se produjo después de que los investigadores lo ubicaran y en cumplimiento a una orden de aprehensión con fines de extradición en su contra por el delito de asesinato de fecha 14 de mayo de 2019 del Juzgado Presidente del Tribunal Tercero de Sentencia Penal, Narcoactividad y Delitos Contra el Ambiente de Ciudad de Guatemala.
“El sindicado tenía activada la notificación roja solicitada por Interpol Ecuador por estar entre los 10 más buscados de su país y el cual aparece en el sitio web del Ministerio del Interior de la República del Ecuador“, agregó la Policía Nacional Civil de Guatemala, quien destacó la colaboración entre los dos países para lograr la aprehensión.
Ángel Rodolfo es uno de los cuatro implicados en el asesinato de las hermanas Julia y Moraima Páramo Jaramillo, ocurrido el 14 de julio del 2012 en Cuenca.
Julia, de 20 años, y Moraima, de 22 años, eran oriundas del cantón El Tambo, provincia de Cañar. Vivían solas en una vivienda de tres pisos ubicada en el sector de Monay, en Cuenca. El inmueble había sido adquirido por su madre, quien radicaba en Estados Unidos.
En ese inmueble fueron golpeadas y estranguladas. Finalmente, los autores dejaron abierta una llave de la cocina para que se escape el gas y en otra habitación una vela encendida para -más tarde- provocar la explosión y borrar cualquier evidencia, de acuerdo con la investigación de la Policía.
Cuando los vecinos alertaron del incendio, los bomberos que intervinieron en la emergencia encontraron los cuerpos incinerados en pisos diferentes. Las hermanas estudiaban en la Universidad del Azuay y se conocían con el ahora detenido.
En los próximos días, Ángel Rodolfo llegará a Ecuador y será trasladado a Cuenca para ser procesado y avanzar con la investigación por este doble crimen.
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