En el evento también participaron estudiantes de los colegios de La Salle de Quito, Chimborazo, Imbabura, Tungurahua y Azuay. Foto: Andrea Rodríguez / ELCOMERCIO
Un grupo de estudiantes del colegio La Salle de Atuntaqui, de la provincia de Imbabura, se alistaba cerca de las 09:45 de este sábado, 18 de mayo del 2019, para participar en el desfile organizado por la comunidad lasallistas y conmemorar el Año Jubilar de La Salle y, sobre todo, los 300 años de la muerte de San Juan Bautista de La Salle.
Este sacerdote, teólogo y pedagogo francés, quien consagró su vida a formar maestros destinados a la educación de niños y jóvenes, fue el fundador de la congregación de los hermanos de las escuelas cristianas. Y para recordar su obra y rendirle homenaje, los más de 80 jóvenes de La Salle de Atuntaqui, entre los que estaban abanderados y escoltas, viajaron más de dos horas hacía Quito.
En el evento también participaron estudiantes de los colegios de La Salle de Quito, Chimborazo, Imbabura, Tungurahua y Azuay. Todos los alumnos se reunieron en el redondel de El Calzado, en el sur de Quito, para desfilar por la avenida Teniente Hugo Ortiz hasta la Baltazar Loaiza, donde se ubica el Colegio Hermano Miguel.
Antes de iniciar el desfile, algunos estudiantes, dirigidos por sus maestros, rezaron una que otra oración y ensayaron algunas canciones que entonaron durante el desfile, en el cual también intervino una banda estudiantil del colegio La Salle de Conocoto.
Durante el desfile, los maestros gritaban: “Jesús vive en nuestros corazones” y los alumnos respondían “por siempre”. Foto: Andrea Rodríguez / ELCOMERCIO
El evento, que comenzó a las 10:00, llamó la atención de los vecinos del sector, quienes acompañaron en el desfile. Mientras los estudiantes y los profesores caminaban por la avenida Teniente Hugo Ortiz, en el graderío de la Tribuna del Sur cientos de padres de familia y autoridades educativas coreaban canciones católicas y levantaban globos de colores azul y blanco, donde se podía leer: “Año Jubilar La Salle”. Allí esperaban a los estudiantes para iniciar una ceremonia religiosa.
Durante el desfile, los maestros gritaban: “Jesús vive en nuestros corazones” y los alumnos respondían “por siempre”. Para la organización de este desfile, los agentes de tránsito cerraron la avenida Teniente Hugo Ortiz y desviaron los vehículos que circulaban por la zona desde el redondel de La Gatazo hasta la calle Baltazar Loaiza.
Alberto Merizalde, profesor de La Salle de Conocoto, indicó que la organización de este desfile se realizó semanas antes con varios ensayos. Para el hermano lasallista Ronald Soto el desfile fue una celebración de alegría, donde participan las autoridades de los colegios, los padres de familia y los estudiantes.