Aunque algunas personas con intereses particulares en actividades ilegales pretendan contarnos otra historia bajo la mentira reiterada de la defensa del agua y del medio ambiente, las cifras de países con una minería industrial responsable -y con recursos como los que tiene el Ecuador- no dejan dudas sobre el rumbo que debemos tomar para salir del atolladero económico y convertirnos en un país próspero, equitativo, sustentable y seguro.
Canadá y Australia son dos potencias económicas, naciones mineras por excelencia y modelo de respeto y protección de la naturaleza. Sus territorios han sido ampliamente explorados, pero en la actualidad se explota el 0,1% de su superficie, inclusive en zonas declaradas como parques nacionales. Sus industrias mineras trabajan con eficiencia, seguridad y un profundo respeto por el medio ambiente, las fuentes de agua y los pueblos ancestrales. En 2017 la minería contribuyó a la economía de Canadá con USD 53 billones. El sector minero australiano contribuye con el 15% del PIB de ese país.
Los extraordinarios descubrimientos en el Ecuador nos han puesto en la mira de las empresas con prestigio internacional para un manejo responsable. La inversión externa ha crecido los dos últimos años especialmente por empresas como Lunding, Ecuacorriente y SolGold. En el año 2018 el país recibió por esta actividad, en exploración y desarrollo de proyectos avanzados, una inversión de USD 777 millones. Durante los próximos cuatro años, la inversión extranjera superaría los 8.000 millones cuando se inicie el desarrollo de cinco proyectos: ‘Fruta del Norte’ (Lunding), ‘Cascabel’ (SolGold), ‘Llurimagua’ (Codelco de Chile con Enami de Ecuador), ‘Cangrejos’ (Lumina) y ‘Loma Larga’ (INV Metals). Esta cifra incrementará el PIB anual del Ecuador en varios puntos porcentuales.
Entre 2019 y 2021 con los proyectos que entren a explotación se proyecta una exportación de minerales superior a 3 660 millones. De esa cifra, aproximadamente 722 millones irán al Estado por la vía de impuestos, regalías y patentes de conservación minera. En ese mismo período, la industria minera formal generará más de 32.000 plazas de trabajo directo.
Pero, sin duda, la cifra que más llama la atención es que el 25% del total de las reservas mundiales de cobre están en nuestro territorio. Considerando que este metal es decisivo para los sectores tecnológicos y de comunicación, el Ecuador tendrá una importancia determinante en todo el planeta.
Las cifras no mienten, nuestras reservas y recursos tampoco. Mienten, eso sí, los que dicen portar la bandera proteccionista del medio ambiente, pero que están detrás de los mineros ilegales que no dejarán jamás esos recursos bajo tierra, y que, como ya se ha demostrado, emprenderán una explotación agresiva, dañina y sin ningún sustento medio ambiental, además de ocasionar problemas de seguridad, trabajo infantil, lavado de dinero y explotación humana.