En las elecciones del domingo 24 de marzo del 2019 se votó con seis papeletas en la zona urbana. Foto: EL COMERCIO
Dos de cada 10 ciudadanos que acudieron a las urnas al domingo 24 de marzo del 2019 anularon su voto para el Consejo de Participación Ciudadana y Control Social (Cpccs).
Eso se desprende del número de actas procesadas, hasta las 15:00 de este martes 26 de marzo del 2019, por el Consejo Nacional Electoral (CNE), en las que se evidencia que un 22,9% de los electores -en promedio- optó por esa alternativa. En tanto, una media del 21,7% dejó las boletas en blanco.
En la elección del representante de las minorías étnicas ante ese organismo, la mayor votación la obtuvo Rosa Chalá (38,39%), entre cuatro postulantes.
Se trata de una abogada que cuenta con el respaldo de la Asociación de Mujeres de Juntas Parroquiales del Ecuador.
Su votación suma 1,9 millones, frente a los 2 millones de nulos que tuvo un peso del 22,2%. Esta última opción fue impulsada por el presidente del Cpccs transitorio, Julio César Trujillo, y por Guillermo Lasso, líder de Creo.
De 28 candidatos hombres solo se podía escoger a tres; la mayor votación recayó en José Tuárez, Walter Gómez y Christian Cruz, aunque cada uno no supera el 10% de los votos, debido a la alta dispersión en esta papeleta.
Los votos anulados, en cambio, sumaron el 23,9%.
En el caso de la papeleta de las mujeres, en que constaban 11 candidatas, las tres que más votos alcanzaron fueron María Fernanda Rivadeneira, Sofía Almeida y Victoria Desintonio. Al igual que en las actas de los hombres, los votos nulos tuvieron un peso similar: 22,76%.
Fue la primera vez que los ecuatorianos acudieron a las urnas para elegir a los integrantes del Cpccs, desde que este organismo fue creado con la Constitución del 2008.
Hubo sectores políticos que impulsaron, principalmente en redes sociales, una campaña para que se anulara el voto como una forma de rechazo a la existencia de esta institución.
Sin embargo, Jorge Acosta, expresidente del Tribunal Supremo Electoral (CNE), cree que el resultado “no es producto de un voto nulo intencional” y, por ende, no puede ser tomado como un triunfo por nadie.
A su juicio, el hecho de que a los 43 candidatos se los separara en tres papeletas generó confusión en la ciudadanía, que, además, desconoce las competencias que tiene esa institución pública.
La Ley Electoral contempla tres condiciones para que se declare la nulidad de un proceso. Una de ellas, dice, cuando los votos nulos superen a los votos de la totalidad de candidatos o de las respectivas listas, en una circunscripción determinada, para cada dignidad.
De las provincias con mayor cantidad de electores, en Pichincha, el 35,56% decidió anular su voto en la papeleta de candidatos hombres y el 34,91% la de mujeres. Mientras, en Guayas, anuló su voto el 21,37% en la papeleta hombres y el 20,67% para mujeres.
La elección fue incluida dentro del proceso para escoger a las autoridades de administraciones locales como prefectos y alcaldes, en cuyo caso el número de votos nulos osciló entre el 10% y el 16%, en los pasados cuatro comicios que se han dado en el país.
De acuerdo con la Ley Electoral, son considerados como votos nulos cuando el elector marque un número de casillas mayor al total de candidatos y candidatas que correspondan a una determinada circunscripción.
O también “los que llevaren las palabras “nulo” o “anulado” u otras similares o los que tuvieren tachaduras que demuestren claramente la voluntad de anular el voto.
La elección de los siete integrantes del Cpccs fue la que mayor controversia generó, sobre todo por el fallido intento del CNE de reglamentar la forma para contabilizar los votos nulos, en vísperas de los comicios seccionales.
De allí que la misión de observadores de la Organización de Estados Americanos (OEA) que acompañó a este proceso, hizo ayer varias recomendaciones al presentar ayer un informe preliminar.
“La misión considera fundamental que en todo momento los ciudadanos y los candidatos tengan certeza y claridad sobre una parte tan trascendental como es el conteo de votos”, expresó Kevin Casas, jefe de la misión.
Sobre el sufragio, los observadores reportaron desconocimiento por parte de los miembros de las juntas receptoras del voto (JRV) en el manejo del material electoral. También registraron quejas por las largas filas que se formaron en algunos recintos electorales para sufragar.
Además, precisó que el esquema de comunicación utilizado para la difusión de las candidaturas “no permitió que la ciudadanía conociera a los aspirantes y que pudiera votar de manera informada”.
Casas también calificó de “problemático” que en el CNE esté en trámite un proceso de descalificación a seis candidatos al Cpccs por una presunta infracción electoral, y pidió garantizar la seguridad jurídica tanto para los postulantes como para los electores que votaron el pasado domingo.