El ruso Oleg Beloguzov fue apuñalado en la base Bellingshausen ubicada en el continente austral. Foto: Captura
Es el primer delito de este tipo que se registra en la Antártida. A este territorio -en el extremo sur del planeta- llegan únicamente investigadores, pues los países que conforman el Tratado Antártico envían únicamente misiones científicas.
El ruso Oleg Beloguzov fue apuñalado en la base Bellingshausen ubicada en el continente austral. Un llamado a la base chilena Eduardo Frei Montalva, ubicada a 200 metros de donde sucedió el incidente, fue el que alertó que Beloguzov se encontraba herido.
El científico debió ser trasladado al continente. Llegó al Hospital Clínico de Magallanes en Chile, en la última región de la Patagonia. “El paciente llegó a las 19:00 horas en estado de gravedad, anémico y con la presión baja, le realizaron exámenes e imágenes y se decidió explorarlo en pabellón, encontramos que tenía una lesión en el ventrículo derecho del corazón, que es potencialmente letal”, dijo el cardiocirujano José Ignacio Iñiguez al diario local El Pingüino.
Su compañero Sergei Savitsky había tomado un cuchillo y lo hirió muy cerca del corazón. Los dos habían pasado alrededor de 10 meses en aquella base y lo más curioso de todo es que a ambos solo les quedaban un par de días para acabar su misión.
¿Qué fue lo que llevó a Savitsky a casi matar a su compañero de trabajo? La razón es bastante extraña. Según el Daily Record, Beloguzov habría tenido la pésima costumbre de contarle a Savitsky los finales de todos los libros que él leía. O sea, fue intento de asesinato por ‘spoiler’. Al parecer, Savitsky se lo tomó muy a pecho porque los libros eran la única entretención que los investigadores tenían en la base.