El Consejo Tsáchila, máxima autoridad integrada por los presidentes de las siete comunas, se reunió y votó para decidir si se debían hacer nuevamente las elecciones. Foto: Cortesía Gobernación Tsáchila
Las elecciones para elegir al nuevo gobernador tsáchila han ocasionado confrontaciones entre los miembros de la etnia. Un grupo de tsáchila impugnó los resultados de las votaciones que se realizaron el pasado 11 de agosto del 2018.
Diana Aguavil, de la Lista 2, obtuvo 488 votos y fue proclamada como virtual gobernadora el 11 de agosto. Mientras Mateo Calazacón, Lista 1, ocupó el segundo lugar con 471 votos y Marcos Calazacón, Lista 3, recibió 157 votos.
Los partidarios de Calazacón afirman que hubo inconsistencias en las actas y padrones electorales. Eso debido a que hubo al menos 37 tsáchilas que no pudieron votar porque no se encontraban registrados en el padrón.
Además, hay actas que no coincidieron con el padrón de Otongo Mapalí y Chigüilpe, comunas a las que pertenecían los tres candidatos.
La impugnación de los resultados fue aceptada por el Tribunal Electoral Tsáchila y el 16 de agosto del 2018 se decidió invalidar las votaciones y convocar a unas nuevas en las próximas semanas.
Esa decisión causó malestar entre los tsáchilas, que se agredieron verbalmente en la Gobernación Tsáchila y la Policía Nacional debió intervenir para evitar incidentes mayores.
La impugnación de los resultados fue aceptada por el Tribunal Electoral Tsáchila. Foto:Gobernación Tsáchila
El Consejo Tsáchila, máxima autoridad integrada por los presidentes de las siete comunas, también se reunió y votó para decidir si se debían hacer nuevamente las elecciones.
Cuatro presidentes de las comunas Otongo Mapalí, Los Naranjos, El Poste y Peripa votaron a favor de que se posesione a Diana Aguavil como gobernadora. Mientras que los representantes de Chigüilpe, Cóngoma y Colorados del Búa votaron para que se convoque a elecciones.
El gobernador tsáchila encargado Flavio Calazacón explicó que, según los reglamentos Tsáchilas, cuando hay una mayoría de votos debe acatarse la decisión. Así que, pese a la disposición del Tribunal Electoral, el Consejo posesionará a Diana Aguavil hasta el 22 de agosto.
Calazacón señaló que en los estatutos tsáchilas no consta ni la segunda vuelta cuando hay un resultado con una estrecha diferencia de votos y tampoco contempla la impugnación de resultados.
“No hay pruebas de que haya inconsistencias o de que el secretario y el tesorero del Tribunal haya modificado el padrón. Por eso, las elecciones son válidas”.
Sin embargo, los simpatizantes de Mateo Calazacón y varios representantes de las comunas Chigüilpe y Cóngoma informaron que no acatarán esa decisión y que irán a instancias legales para impedir la validez del proceso electoral tsáchila. “Si es el caso pediremos una acción de protección y la intervención de instituciones mestizas”, dijo Richard Calazacón.