Ecuador sigue utilizando foros internacionales para exponer sus posiciones sobre temas externos o relacionados con otros países. Esto ocurrió en la reunión de la Organización de Estados Americanos (OEA) que se realiza en El Salvador desde ayer hasta hoy.
La embajadora ecuatoriana ante ese organismo internacional, María Isabel Salvador, expresó “el enérgico rechazo a cualquier intento de agresión contra Venezuela”. Igual lo hizo el representante nicaragüense, Denis Moncada, quien agregó que estas medidas atentan contra la seguridad y la paz regional.
Estas declaraciones se dieron en el marco de la 41ª asamblea, que fue convocada para discutir temas relacionados con la seguridad ciudadana en América.
Salvador y Moncada se refirieron a la decisión de los Estados Unidos, del 24 de mayo pasado. Ese día se anunciaron sanciones contra la estatal petrolera venezolana Pdvsa y otras seis pequeñas empresas por hacer negocios con Irán. Esto, según su argumento, es una violación a la veda impuesta por Washington.
El subsecretario de Estado, James Steinberg, dijo que las sanciones a Pdvsa le impedirán acceder a contratos con el Gobierno de EE.UU. y a financiamiento para importar y exportar, pero no afecta a las ventas de petróleo de la empresa a EEE.UU. ni las actividades de sus subsidiarias.
Ecuador y Nicaragua, en el pleno de la OEA, rechazaron y calificaron como “desestabilizadoras” las sanciones de EE.UU.
Esta nueva posición de Ecuador generó reacciones en el país. El ex vicecanciller Marcelo Fernández de Córdova piensa que lo ocurrido entre EE.UU. y Venezuela ocurre en el ámbito de “relaciones bilaterales” y, por lo tanto, se debe manejar entre los países implicados. “Estas declaraciones no benefician en nada la situación que atraviesan EE.UU. y Ecuador”, aclara.
El presidente del Comité de Empresas, Blasco Peñaherrera, concuerda con Fernández de Córdova y piensa que “los discursos del Ecuador deben ser muy prolijos, y cuidando que no se cometan errores”, porque cada error “nos aleja de los mercados desarrollados que necesita el país y será muy difícil recuperar esos espacios”.
Honduras ya participa nuevamente en los debates, una vez que regresó al seno del organismo. Este fue el motivo para que el canciller Ricardo Patiño no asista a la reunión.