Estoy de acuerdo con el artículo de EL COMERCIO, respecto de la ‘Expectativa por el relevo en la Cancillería’. Es hora que se dé importancia, a un Ministerio de tanta relevancia, en las relaciones internacionales del Ecuador, con el resto del orbe y que dichas funciones sean ocupadas, por gente capacitada y experimentada sobre el tema diplomático, además de que, se debe respetar la carrera diplomática, menospreciada desde el 2006.
Recordemos que la carrera diplomática, no es cualquier cosa, sino una profesión o actividad que exige una formación y experiencia académica previa y, generalmente, la superación de un concurso público para acceder a aquella. ¿Como es posible, según EL COMERCIO que entre los funcionarios diplomáticos, hay gerentes educativos, fisioterapistas, ingenieros agrónomos, filósofos, maestros, entre otros?, como en farmacia.