La ruta Valle Hermoso-Cristóbal Colón une a las provincias de Santo Domingo y Pichincha, en el noroccidente. Foto: Katherine Delgado/PARA EL COMERCIO
La vía Valle Hermoso- Cristóbal Colón – Los Bancos se integra a las rutas alternas para viajar desde Quito hacia la Costa y viceversa.
Esta arteria fue inaugurada recientemente y es considerada otra conexión entre Santo Domingo de los Tsáchilas y la capital (Pichincha).
Sus puntos de conexión referenciales son la parroquia rural Valle Hermoso y el cantón Los Bancos, en el noroccidente de la provincia de Pichincha.
Las autoridades señalan que su utilidad es importante, sobre todo cuando las vías principales presenten problemas en el invierno, que causa derrumbes o accidentes.
La Prefectura de Santo Domingo construyó un tramo de 15 kilómetros, con lo cual quedaron habilitados los 125 kilómetros de esta arteria entre las dos provincias.
Se calcula que en días regulares circulan unos 8 300 vehículos, según la Prefectura tsáchila. Esta entidad construyó la carretera de dos carriles en un año con una inversión de USD 7 709 342.
Con esta vía, Quito y la Costa tienen cuatro conexiones. Las otras son: La Independencia- Puerto Quito- Los Bancos-Nanegalito- Calacalí; Alóag-Santo Domingo y Santo Domingo Las Mercedes – 10 de Agosto- Los Bancos – Calacalí.
De las cuatro, el trayecto más largo es Calacalí-La Independencia y el más corto el de la Alóag – Santo Domingo.
Se calcula que el tiempo de recorrido por la nueva vía es de más de dos horas de viaje. Por esta conexión se puede viajar directamente hacia Manabí.
Según el Ministerio de Transporte y Obras Públicas (MTOP), se deben considerar las facilidades, el tráfico y las mejoras en las vías para acortar las distancias de los viajes.
Por ejemplo, la Valle Hermoso- Cristóbal Colón cruza por una zona rural que está poblada por habitantes de cuatro recintos. Ellos se movilizan en motos, camionetas, caballos y burros. Así sacan su producción a la ciudad de Santo Domingo y al punto más cercano, que es Valle Hermoso, ubicado a 10 minutos.
En esas zonas se cultivan cacao, plátano, palma africana, maíz, caña de azúcar y otros productos frutales.
El prefecto de Santo Domingo, Geovanny Benítez, asegura que en el momento esta vía soporta un poco menos de la tercera parte del tráfico diario que tienen las otras vías que conectan a su provincia con Pichincha. Pero existe la proyección de que aumente la circulación cuando se conozca que está mejorada, y con señalización horizontal y vertical.
En sus dos carriles, de 7,20 metros de ancho y una carpeta asfáltica de 3 pulgadas de espesor, cuenta con reductores de velocidad.
Las autoridades consideran que la vía tendrá una vida útil de 30 años. En el momento está pendiente la iluminación, pues
hay pocos postes de luz en los márgenes de la ruta.
Los habitantes de Cristóbal Colón, recinto de Valle Hermoso, aseguran que esta vía existe desde hace 45 años, pero sus condiciones no eran de las más óptimas y por eso no tuvo tanto tráfico durante ese tiempo.
Santos Camposano tiene 75 años de edad y recuerda que la carretera era empedrada y de difícil circulación. Él, por ejemplo, se hacía hasta dos horas de viaje en un caballo para llevar su producción de cacao hasta Valle Hermoso.
Ahora no solo traslada su cosecha en camioneta sino que aprovecha los buses de transporte interprovincial que cruzan por la zona.
La Cooperativa Santo Domingo es la única que tiene cuatro frecuencias diarias para llevar a los pasajeros.
Los conductores que por primera vez viajaron por la carretera piden que otros tomen precauciones en los tramos donde hay curvas pronunciadas.
Marcelo Zambrano aseguró que al tratarse de dos carriles , y con curvas, no es posible avanzar a altas velocidades.
El pasado martes circuló por la vía y encontró también a personas caminando por fuera de las cunetas.