A las 11:00, de hoy, cuatro personas ingresaron con tres rumas de carpetas hasta el Consejo de la Judicatura en Transición (CJT). Era la documentación con la que Fernando Rosero, ex legislador del Partido Roldosista Ecuatoriano (PRE), respaldó la impugnación contra Juan Falconí Puig en su candidatura a juez de la Corte Nacional de Justicia.
Falconí es uno de los 330 candidatos que pasó a la fase de méritos, tras superar las de idoneidad legal y psicológica dentro del concurso para la designación de 21 magistrados.
A la par, el Instructivo del concurso permite la presentación de impugnaciones. De allí que Rosero respaldó su acción en el artículo 183, numeral 3, de la Constitución, que determina que entre los requisitos para ser magistrado se requiere: “Haber ejercido con probidad notoria la profesión de abogado, la judicatura o la docencia universitaria en ciencias jurídicas…”.
Esta tarde, mediante un comunicado, Falconí Puig dijo que: “No tiene calidad para impugnar a nadie. De oscuro pasado, quiere precaver su futuro por los juicios en los que aún tiene que responder”. También cuestionó el paso de Rosero por la Comisión Ocasional del Congreso Nacional, que investigaba casos de narcotráfico.
En tanto, en voz alta, Rosero iba enumerando los 42 cuerpos de documentos que entregaba en una ventanilla en la planta baja del CJT para sustentar 17 denuncias de supuestas anomalías en contra de Falconí.
Recordó el juicio político y censura que le siguiera el entonces Congreso Nacional cuando era superintendente de Bancos. Rosero, en su condición de diputado, fue el interpelante. El 10 de noviembre del 2000, Falconí fue destituido de su cargo.
Otro argumento de Fernando Rosero es que Falconí mantiene un litigio legal contra el Estado al demandar a TC Televisión, canal incautado.
En su comunicado, el jurista que busca uno de los 21 puestos de magistrado no respondió a estas acusaciones. Más bien, entre otras cosas, cuestionó el título de abogado de Fernando Rosero y sus actividades como contralor durante el Gobierno de Abdalá Bucaram.
El pleno del CJT conocerá y calificará estas y otras impugnaciones hasta el 20 de octubre. Luego cada caso será resuelto en una audiencia.
Hasta ayer, el CJT no oficializó ni el número ni el nombre de más candidatos impugnados.