En el Palacio Municipal de Guayaquil representantes del Cabildo y la Agencia Francesa de Desarrollo firmaron un convenio de financiamiento por USD 114,3 millones. Foto: Alexandre García / EL COMERCIO
El alcalde de Guayaquil, Jaime Nebot, y el director de la Agencia Francesa de Desarrollo (AFD) para Colombia y Ecuador, Maurice Bernard, firmaron el contrato de financiamiento para el nuevo sistema de transporte alternativo aéreo suspendido de la Aerovía, un préstamo por USD 114,3 millones.
Se trata del primer crédito sin garantía de Gobierno Nacional que la AFD, el banco de desarrollo del Gobierno Francés, otorga a un gobierno local sin el aval de la Nación, según destacaron las partes durante el acto de firma, el 4 de agosto de 2017, en el Palacio Municipal de Guayaquil.
El Municipio porteño consiguió el crédito a 20 años plazo, con cinco años de gracia, y al 4,88% de interés anual, un porcentaje menor a la tasa del Banco Central del Ecuador (BCE), destacó el Alcalde.
La Aerovía prevé transportar a diario 40 mil personas entre Durán y el centro de Guayaquil, un sistema similar a un teleférico con 134 cabinas para 10 pasajeros cada una. El proyecto busca
descongestionar vías de ingreso a la ciudad como el puente de La Unidad Nacional y la avenida Pedro Menéndez Gilbert, reduciendo los atascos de las horas pico, de 50 minutos o una hora en el transporte convencional, hasta entre 15 y 20 minutos con el nuevo sistema de transporte aéreo suspendido.
La AFD financia el 85% de la inversión requerida para la obra, mientras que Poma, la empresa francesa que se adjudicó licitación del proyecto, y que tendrá a cargo la construcción y operación de la Aerovía, financiará el 15% de la inversión restante.
Nebot explicó que antes de hacer oficializal el convenio construcción y operación con Poma, la Municipalidad debía primero proveer el grueso del financiamiento.
El Cabildo espera firmar hasta mediados de agosto el contrato con Poma, luego de la revisión del documento por parte del Procurador General del Estado.
“Hay todas las garantías de solvencia económica y solvencia técnica para la operación”, indicó Nebot, quien busca avanzar en la solución de los problemas de tránsito de la ciudad. Los pasajeros cubrirán el trayecto “cómodamente sentados en sus cabinas” – dijo- en cerca de un cuarto del tiempo que utilizan actualmente, en hora pico, en los recorridos de buses urbanos.
Maurice Bernard, representante de la Agencia Francesa de Desarrollo, destacó la operación como simbólica, pues al otorgar el crédito sin garantía del gobierno central, distingue el papel de los gobiernos locales en el desarrollo en un mundo globalizado.
“Guayaquil es una ciudad innovadora, con una gestión financiera impecable que nos dio la confianza de otorgar un crédito al Municipio de forma directa, que cuenta con la autonomía e independencia para impulsar su desarrollo”, dijo Bernard.
El jefe de la Misión Francesa indicó también que el proyecto de Aerovía sustituirá un tipo de transporte que consume energías fósiles por un sistema de transporte público que ofrece ventajas en términos de sostenibilidad social y ambiental.