En caso de un accidente casero, es necesario mantener la calma y actuar de manera prudente. Si se toman decisiones apresuradas, es posible que las lesiones de la víctima empeoren y su estado se deteriore.
Por eso, la principal recomendación es mantenerse cerca de la persona herida o golpeada y llamar al 911. Allí, un profesional proporcionará la guía adecuada para actuar en el caso de caídas, cortaduras, golpes, fracturas, quemaduras y otras lesiones, producto de un accidente casero.
La llamada es importante, porque se puede salvar una vida. Además, el personal calificado le ayudará a no cometer errores frecuentes, como movilizar inadecuadamente a la víctima o colocar sustancias nocivas sobre las heridas que tiene.
En una asfixia, retire el objeto que obstruye
No sacuda a la víctima y apriete su abdomen
Siempre que haya un accidente en casa, se debe llamar al 911.
Es común que los niños se asfixien con algún objeto o alimento. En esos casos suelen tomarse del cuello y desesperarse.
Afloje la ropa del torso. Ponga una mano en donde confluyen las costillas, en el inicio del abdomen, y presione con la otra hacia adentro y hacia arriba.
No se debe sacudir a la víctima para ayudarle a expulsar el objeto que le está asfixiando. No es una táctica adecuada.
No es necesario hacer que levante sus manos. Eso no ayudará a que tosa, que es lo único que permitirá un alivio a la víctima.
No es correcto intentar introducir un objeto por la boca. Eso restará más el aire que la víctima necesita.
Detenga el sangrado si hay una cortadura
Para detener la hemorragia utilice un apósito (tela, venda, gasa). Se debe colocar sobre la herida y luego presionar hasta que deje de sangrar.
Luego puede lavar la herida con agua limpia y con mucho cuidado, para no reactivar el sangrado.
Si el corte es pequeño, déjelo al aire libre. Si no, puede cubrirlo con algo limpio.
Estos accidentes se producen cuando intenta hacer labores con las herramientas no adecuadas.
No ponga sal, limón, tela de huevo, jabón ni otras sustancias sobre una herida, puede infectarla.
No retire pedazos de vidrio o de metal de una herida profunda, porque puede empeorar la hemorragia. Déjeselo al experto.
Enfríe la quemadura colocando agua tibia
No aplique otro líquido o sustancia sobre la herida
Si sufre una quemadura con un líquido hirviendo, deje caer un chorro de agua tibia sobre el área afectada, por varios minutos .
Luego cubra el área afectada con un vendaje flojo. No presione.
Si se forma una ampolla o hay desprendimiento de piel, solo enfríe la herida y llame al 911, para que la revise el personal calificado.
Nunca debe colocar pasta de dientes, aceite, tela de huevo, leche ni ninguna sustancia sobre el área afectada. Puede empeorar la quemadura.
No coloque agua fría sobre la herida. Por el tiempo de exposición puede causar hipotermia a la persona afectada.
No retire nada que esté pegado sobre la zona quemada.
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No mueva a un caído hasta verificar su estado
Lo primero es confirmar que esté consciente
Las caídas en el hogar son comunes, al tratar de alcanzar un sitio alto o en la ducha.
Antes de mover a la persona, verifique si está despierta, si tiene fracturas, hematomas, heridas abiertas o hemorragias.
Monitorear el pulso y la respiración. Llame al 911, para recibir consejos y una guía.
En caso de fracturas o de luxaciones, no se debe intentar colocar los huesos en su sitio. Eso solo lo hace un experto.
Cuando hay inconsciencia, debe tratar de mantener la temperatura, mientras llega una ambulancia.
Es peligroso mover a un accidentado. Al hacerlo, puede empeorar lesiones en la columna, por ejemplo.
‘Una gasa me ayudó’
Alejandra Cajo. Psicóloga
El miércoles de la semana pasada se fue la luz en mi casa, en el sur de la ciudad. Esto hizo que nos viéramos obligados a calentar agua para bañarnos. Coloque agua en una olla grande de aluminio y la puse sobre la hornilla de la cocina, cuando el agua hirvió me puse unos guantes de cocina y tomé la olla para llevarla hacia el baño.
Por motivo de vacaciones, mis dos hermanos pequeños están en la casa, ellos jugaban y corrían por todos los pasillos. Antes de llegar al baño, mi hermano Carlos corrió hacia mí, le pedí que se detuviera gritándole que sostenía una olla con agua hirviendo, sin embargo, él no logró escucharme y se abalanzó sobre mí… Para evitar que el agua se vertiera sobre él, traté de sostener la olla con la mano derecha y con la izquierda impedir que se me acercara, como la olla estaba muy pesada se regó el agua sobre el piso e hizo que mi hermano se resbalara y le cayó parte del contenido en el brazo derecho.
Inmediatamente, le retiré el saco que llevaba puesto, en mi casa contamos con un botiquín en el cual tenemos esparadrapos, alcohol, aspirinas y Jelonet, que es una gasa que calma el dolor de las quemaduras. Tomé una del botiquín y se la puse en el brazo. Eso calmó sus molestias y nos dio tiempo para acudir a un centro médico, para constatar si la quemadura que sufrió mi hermanito era de gravedad. Tener un botiquín en casa es vital.
‘El 911 salva vidas’
Bolívar Asnalema. Médico y bombero
Soy médico desde hace 20 años y bombero desde hace cuatro. Es importante que la gente llame al 911 en casos de emergencia, porque cuenta con personal capacitado. En la central estamos bomberos, paramédicos, médicos… que podemos ayudar a la gente. La semana pasada tuvimos un caso importante.
A las 24:15 del 13 de julio tuvimos una llamada de emergencia a nuestra central, el Cuerpo de Bomberos de la Loma Grande, en el centro de Quito. Era una señora que nos dijo que su hermana había dado a luz una niña en su domicilio. Inmediatamente, con el personal de primeros auxilios nos dirigimos en la ambulancia a la casa de la señora, en la 24 de Mayo.
Al llegar encontramos a la mujer con el bebé en brazos y con un fuerte sangrado vaginal. El equipo de primeros auxilios está conformado por un paramédico y un médico, ambos bomberos. La mujer tenía la presión arterial baja. La estabilizamos proporcionándole líquidos vía intravenosa y luego la subimos a la ambulancia junto con su hija, pues no podíamos detener el sangrado. La llevamos al Centro de Salud N° 1, en la calle Rocafuerte. Ahí la valoraron. El médico del Centro de Salud dijo que se le debía realizar de urgencia un legrado (limpieza quirúrgica del útero).
Como allí no contaban con los instrumentos médicos necesarios para eso, la trasladamos a la Maternidad Isidro Ayora. Allí nuestro trabajo terminó.