‘Star Wars: Episode IV – A New Hope’ cambió el rumbo del cine
con sus efectos especiales y su vocación abiertamente comercial. Foto: Facebook / Star Wars
Han pasado 40 años del estreno del primer filme de ‘Star Wars’, y todavía cuesta definir exactamente qué mismo estamos celebrando. El impacto de esta película de guerrilleros espaciales, ejércitos imperiales, naves con velocidad de la luz, alienígenas y robots es inconmensurable.
Se ha escrito mucho sobre las fuentes que inspiraron a George Lucas, en ese entonces un entusiasta y casi novato director que tenía una idea en la que pocos creían. Ni siquiera el mismo Lucas, que no estuvo presente en el estreno del 25 de mayo de 1977 porque le daba vergüenza dar la cara a lo que él vaticinaba como un fracaso. Sí, el visionario Lucas, que marcó la ruta del cine mediante los efectos especiales, fue incapaz de ver el potencial de su historia. Lo dominó el lado oscuro de la fuerza.
También, estamos informados de historias y anécdotas sobre los entretelones de la filmación, la selección del elenco, las críticas internas a los diálogos (Harrison Ford estaba furioso por ser Han Solo) y, sobre todo, del descomunal esfuerzo para obtener los mejores efectos especiales posibles.
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El impacto fue enorme. ‘Star Wars: Episode IV – A New Hope’ fue una cinta abiertamente comercial, la primera de su tipo, y su éxito en taquillas generó una revolución en mercadotecnia, con muñecos y réplicas de naves a la venta que hoy todavía obsesiona a los fanáticos.
Las sagas, es decir, las segundas y terceras partes, fueron posibles gracias a los tres filmes de ‘Star Wars’, lo cual fue imitado para siempre. La ventaja de esto fue ampliar el relato para crear una mitología.
También hubo una suerte de coincidencia con el auge de la filosofía ‘new age’ de los años 70, así que el público se conectó con la pugna del bien y el mal propuesta en ‘Star Wars’, con un lado oscuro y un lado iluminado pero, de todos modos, ambos vinculados a una entidad que organiza al mismo Universo. Los jedi, esos policías para-espirituales, se volvieron en la encarnación de la Justicia, incluida la divina.
Los festejos de este aniversario se opacan, sin embargo, cuando se descubre que este filme se ha transformado en una ‘hydra’ con miles de cabezas, sobre todo desde que Disney compró los derechos y transformó a ‘Star Wars’ en una franquicia. Debe ser triste que, a cambio de USD 4 050 millones, Goofy aparezca en las tiendas de Orlando con el disfraz de Darth Vader.
TRIVIA
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