En el bulevar de las Naciones Unidas se conmemoró el Día Internacional de los Desaparecidos. Foto: Eduardo Terán / EL COMERCIO
Desde las 18:00 de este martes 30 de agosto del 2016, un grupo de familiares de personas desaparecidas se congregó en el bulevar de las Naciones Unidas, en el centro norte de Quito, para conmemorar el Día Internacional de los Desaparecidos.
Según Telmo Pacheco, presidente de la Asociación de Familiares y Amigos de Personas Desaparecidas en Ecuador (Asfadec), el plantón tuvo como objetivo visibilizar un problema social que afecta al país. “Este no es un tema solo de las familias de los desaparecidos sino de todos. A diario hay casos de personas de las cuales no se sabe su paradero”, dijo.
En el bulevar se reunieron cerca de 40 personas. En la acera colocaron las fotografías de sus familiares y, a las 18:30, encendieron velas como símbolo de luz a la memoria de sus familiares.
Después, con un megáfono, cada uno de los familiares contó su historia. En el caso de Pacheco, su hijo desapareció en el 2011. Desde ese momento no ha tenido respuesta. “Nadie puede entender cuánto extraño a mi hijo. Son ya cinco años de no tener una respuesta”, contó.
Todos los asistentes coincidieron en una cosa: es necesario que haya más agilidad en la investigación de los casos en Ecuador.
Según Alexandra Córdova, madre de David Romo, desaparecido en el 2013, no es suficiente el que se haya creado la Dinased y un grupo en la Fiscalía para atender los casos de desapariciones.
“Se necesita que en esos equipos existan personas capacitadas en la búsqueda de personas. De lo contrario es una búsqueda como la de una aguja en un pajar. Se debe determinar cuántas personas están desaparecidas, a qué se debe, conocer la realidad por género y edad. Porque este es un fenómeno que nos compete a todos como sociedad”, señaló.