Un incendio estructural se produjo en la casa del migrante la noche del 20 de enero del 2016. Foto: Vicente Costales / EL COMERCIO
Un incendio estructural se produjo la noche del miércoles 20 de enero del 2016, en el centro de acogida para ciudadanos extranjeros en proceso de deportación. Las llamas salían por las ventanas del segundo piso del edifico en el que se encontraban 45 extranjeros.
A las 21:36 del miércoles 20 de enero del 2016 se produjo el siniestro. Las llamas empezaron en el segundo piso del edificio que queda en la Versalles y Carrión, en el centro norte de Quito, cerca de la Universidad Central.
Los 45 extranjeros que se encontraban en el interior fueron trasladados a una zona abierta en la planta baja mientras los miembros del Cuerpo de Bomberos apagaban las llamas. El teniente de Bomberos, Rommel Duque, señaló que al sitio acudieron cuatro unidades contra incendios, 19 efectivos y 2 motos.
Los bomberos se demoraron cerca de 10 minutos en el control de las llamas. Al ingresar, se percataron que una habitación estaba consumida por el fuego y que el resto tenía humo. El teniente comentó que esperarán el informe de la unidad de investigación para saber si el incendio fue provocado por algún interno.
El mayor de Policía. Mauricio Valladares, jefe de control del Distrito, realizó la inspección del sitio. Él corroboró que no hubo personas heridas por el incendio. Señaló que cerca de 50 miembros de la Policía se hicieron presentes para evitar que se produzcan inconvenientes. Se confirmó que una persona extranjera está bajo investigación.
Personal del Grupo de Intervención y Rescate, del Grupo de Operaciones Especiales y del Grupo de Operaciones Motorizadas estuvieron en el sitio para controlar situaciones adversas que se presentaran. Los vecinos se sorprendieron por la cantidad de sirenas y balizas que rompieron la monotonía de la noche.
Ellos reclamaron por mayor seguridad no solo en el centro para migrantes, sino en los alrededores de la Universidad Central, un sitio al que consideran peligroso.
Los extranjeros que estaban al interior se quejaron por el trato recibido durante la emergencia. “Prefieren que muramos encerrados a dejarnos libres” se escuchó por una de las ventanas. Las 45 personas fueron llevadas a los dormitorios en donde no existía peligro y quedaron con resguardo policial.