Afiche de la investigación.
Cada año se registran alrededor de 2 000 casos de niñas menores de 14 años con embarazos en Ecuador
Las victimas enfrentan graves afectaciones de salud física, mental y social. Las dos últimas con mayor fuerza.
Esto sostiene la investigación Vidas robadas: entre la omisión y la premeditación (la situación de la maternidad forzada en niñas del Ecuador), que fue presentada la noche de hoy 27 de octubre, en el hemiciclo de la Facultad Latinoamericana de Ciencias Sociales (Flacso).
Texto es una iniciativa de la Fundación Desafío, que tuvo un enfoque cualitativo y se concentró en Quito. El documento recoge el drama de 15 niñas, quienes fueron víctimas de violaciones y resultaron embarazadas antes de cumplir 14 años.Menores de un estrato bajo y que tuvieron que afrontar grandes cambios en su vida.
El trabajo es también una denuncia, pues plantea que las niñas son obligadas a adoptar un papel: ser madres, lo que supone renunciar a su proyecto de vida. Al momento no existen estrategias integrales para afrontar esta problemática social, según el estudio, y por eso es un llamado a afrontar el problema.
En Ecuador, el porcentaje de partos de niñas de entre 10 y 14 años, se incrementó entre 2002 y 2010 en aproximadamente un 78,1%. Hace cinco años hubo 3 864 niñas menores de 14 años embarazadas producto de la violencia sexual.
En Sudamérica, Ecuador ocupa el segundo lugar, tras Venezuela, en la lista de países donde la tasa específica de fecundidad adolescente no ha disminuido en los últimos años. En 2010, 122 301 madres ecuatorianas -de 3 645 167- fueron adolescentes.
La investigación fue presentada a la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) como parte de un conglomerado de trabajos similares que se realizaron en otros países de la región como Perú y Nicaragua.
El acto en el que se presentó el estudio contó con la intervención de Ana María Goetschel, profesora investigadora de Flacso; Alberto Narváez, de la plataforma por la Salud y la Vida; Kelly Perneth, M.A. en Género y Desarrollo por Flacso; y Virginia Gómez de la Torre, presidenta de Fundación Desafío y coautora de la investigación.
Narváez, desde el ámbito médico, reconoció que muchas veces en su sector se invisibiliza este tipo de problemas, tratando de centrarse en otros problemas. Además, indicó que la maternidad a tan corta edad genera problemas sanitarios de índole física, como la desnutrición; y psicológicos como la depresión.
Para Virginia Gómez “se debe considerar como soluciones a corto plazo de esta problemática a la anticoncepción, el aborto legal, e incluso la adopción”.