Mauricio Rodas dialogó con los comerciantes este 10 de julio de 2015. Foto: Eduardo Terán/El Comercio
La sala del Concejo Metropolitano de Quito se llenó de trabajadores autónomos, la mañana de este viernes 10 de julio. El alcalde de la ciudad Mauricio Rodas llegó a compromisos con uno de los sectores de comerciantes que dijo sentirse perjudicado al haber perdido el dinero en las ferias organizadas con motivo de la misa del papa Francisco en el parque Bicentenario, el último martes.
Rodas se comprometió a conversar con el otro sector, que ayer (9 de julio) se unió a la concentración en contra de su gestión en las afueras del Palacio Municipal.
Entre otros acuerdos, el Burgomaestre les ofreció incluirlos en ferias que se desarrollarán en lo que resta del año. Les dijo que no deberán pagar ninguna regalía por participar en ellas. Para ser ubicado en uno de los siete puntos alrededor del Bicentenario, los 2 100 vendedores se registraron y pagaron USD 14,38 de regalía. También les dijo que continuará el proceso de regulación.
En la sala de reuniones del Concejo estuvieron dirigentes como Carlos Castellanos, quien preside la Confederación Unitaria de Comerciantes Minoristas y Trabajadores Autónomos del Ecuador (Cucomitae). Él en el 2013 fue candidato a asambleísta por la lista de la Unidad Plurinacional, MPD y Pachakutik.
En la cita con el alcalde Rodas, Castellanos denunció que la noche del domingo 5 de julio, cuando los comerciantes estaban instalados en sus puestos de venta, pasaron delegados del Ministerio del Interior. Y supuestamente les dijeron que debían ubicarse a tres kilómetros del paso del papa Francisco. “Dijeron que pasarían el Ejército y la Policía Nacional y que desalojarían las carpas de La Y”.
El dirigente sostuvo que no solo en el Bicentenario les fue mal a los comerciantes sino también en El Quinche e incluso en Guayaquil. “Querer responder al desempleo y a la miseria que existe en Ecuador de esta forma es inadecuado. Señores del Gobierno no traten de desviar los problemas sociales que existen en Ecuador por este problema del Papa. Hoy tajantemente no vamos a permitir que nos hagan sánduche a trabajadores autónomos, quieran aprovecharse del trabajo unos pseudo dirigentes y pseudo concejales, pescar a río revuelto…”.
En Concejo también se criticó a la Comisión de Comercio, dirigida por la concejala de Alianza País, Soledad Benítez. Ella dijo estar preocupada porque considera que se entregaron permisos a los comerciantes, para ubicarles cerca al Bicentenario, sin el mínimo criterio de la planificación y organización. “El señor Castellanos representa a una organización cercana al MPD desde hace años, no puede tomarse el nombre y la representación de los trabajadores autónomos”.
La edil indicó que en todo el sistema de comercio hay 27 000 comerciantes, 12 000 autónomos, que hacen actividad económica en el espacio público; 5 500, de los centros comerciales del ahorro. No puede tomarse la palabra de ellos. Hay asociaciones diferentes y comerciantes que actúan independientemente. Mi equipo estuvo en el Concejo y decían que ellos representan a tantos.
El alcalde Rodas aseguró que hablará con todos los comerciantes. “Con los del MPD y otros sectores. El lunes me voy a reunir con los comerciantes, no sabemos si lo son o no, pero con quienes estuvieron protestando la tarde de ayer (contra su gestión). Los voy a invitar para conversar”.
También sostuvo que el problema del comercio autónomo viene de años, que no lo ha provocado su administración. “En la administración anterior hubo más de 12 000 comerciantes informales en las calles del Distrito y fue un problema que lejos de resolverse se empeoró.
Por su magnitud no se pueda resolver de la noche a la mañana. Obedece a una problemática social profunda, a los altos niveles de desempleo, reducción de la actividad económica no solo en Quito sino de otras provincias, provoca la migración de muchos ciudadanos a nuestra ciudad, para dedicarse al comercio informal. Es una problemática complicada, con enormes connotaciones sociales, no provocada por el Municipio sino por las condiciones sociales, políticas y económicas del país“.
En la reunión, Castellanos, dirigente de comerciantes, también criticó el papel de la Agencia Metropolitana de Control y la Secretaría de Movilidad. Según sostuvo no cerró las calles porque “el Gobierno insistió en que no se hiciera”.