El delantero de la selección Brasil Roberto Firmino habla en una rueda de prensa del equipo hoy, martes 23 de junio de 2015, en Santiago, Chile. Foto: Agencia EFE
La despedida cierra un ciclo: Neymar se fue y Brasil busca seguir adelante sin su principal jugador. Después de un día de descanso, comenzaba este martes su preparación para el duro juego contra Paraguay, su verdugo en la Copa América de hace cuatro años.
El entrenamiento de este martes es el primero sin Neymar en Chile, de cara al partido de cuartos de final de la Copa América-2015 que se jugará en la fría Concepción (sur) el sábado. El DT Dunga no debería sorprender y debería apostar por el equipo titular que derrotó a Venezuela (2-1) en el último partido de la fase de grupos, el domingo.
“Quedamos tristes con su ida, pero la selección busca motivarse cada día que pasa para que cada juego que venga pueda conseguir la victoria”, dijo el el atacante Roberto Firmino, que habló en conferencia de prensa este martes en Santiago. Firmino fue el autor del segundo gol en la victoria sobre la Vinotinto.
Neymar abandonó la concentración el lunes, después de la Confederación Brasileña de Fútbol (CBF) decidiera no apelar la sanción de cuatro juegos de suspensión que le impuso la Conmebol por los incidentes tras la conclusión del partido que Brasil perdió contra Colombia por 2-1 el pasado miércoles.
Al final de dicho encuentro, Neymar fue expulsado tras arrojarle un balón al defensa cafetero Pablo Armero, en medio de una gresca con rivales. Luego insultó en los vestuarios al árbitro chileno Enrique Osses, aunque el jugador lo niega. “Yo estaba en el túnel, sabía que el árbitro estaba llegando y esperé para preguntarle por qué me había expulsado, sólo que comenzó un movimiento de guardias de seguridad que pensaban que yo estaba más irritado de lo que estaba, que pensaron que yo quería pegarle”, explicó Neymar el lunes a la televisión Globo.
Del incidente, los jugadores aprendieron una lección: “hay que ser astuto para que esto no pase de nuevo”, dijo Firmino.
Fue Paraguay el verdugo de Brasil en la pasada Copa América de Argentina-2011, también en los cuartos de final. Firmino, un novato con la camiseta brasileña, sabe que el partido contra la selección guaraní “va a ser un juego duro, disputado”. “Ahora es eliminación directa, tenemos que ganar”, indicó.
El ambiente parece estar más tranquilo en la concentración de la selección brasileña, a pesar de la salida de Neymar. La victoria contra Venezuela, con el astro apoyando desde la tribuna y antes en el vestuario, inyectó carga positiva al equipo.
El veterano Robinho asumió el papel de líder ofensivo y condujo el equipo a la victoria, usando su experiencia y el buen momento que atraviesa en el fútbol brasileño. “Es un excelente jugador y nos ayudó bastante en el último juego con su experiencia. Él estuvo excelente y conseguimos la victoria”, dijo Firmino.
Paraguay llegó en crisis a Chile y pocos le daban chances de pasar a cuartos de final, pero terminó segundo en el Grupo B con un triunfo ante Jamaica 1-0 y dos empates frente a Argentina (2-2) y Uruguay (1-1).
El defensor guaraní Paulo da Silva advirtió que su selección saldrá a “matar o morir” ante Brasil, lo que ya da una adelanto de la temperatura que tendrá este encuentro en la helada Concepción. Brasil chocará con el sistema defensivo extremo que caracteriza a Paraguay, y a Dunga tampoco disgusta.
“Buscamos siempre movernos en el campo, respetar la opinión del profesor Dunga, de lo que pide”, indicó Firmino, que disputa la titularidad con Diego Tardelli. Brasil no querrá repetir la historia y tratará de ganar el juego en el tiempo reglamentario, evitando como llegar a la decisión por penales, que ya le costaron la eliminación hace cuatro años.