Los conductores y pasajeros que transitan a diario entre la avenida Simón Bolívar y la av. Los Granados alargaron su tiempo de desplazamiento desde que empezó la construcción del Intercambiador El Ciclista, junto al nuevo edificio de la UDLA.
Este Diario lo constató la mañana de este miércoles 20 de mayo del 2015. A las 07:50, en hora pico, tomó 20 minutos desplazarse en vehículo por el carril de alta velocidad (izquierdo) desde el extremo norte del intercambiador de Monteolivo hasta el lugar de los trabajos en El Ciclista, un tramo de 2 kilómetros en sentido sur-norte. El fin de semana, sin una alta carga de tránsito, la misma ruta se puede atravesar en tres minutos (a 90 km/h). Mientras que caminando, ese tramo se recorre en 30 minutos.
Homero Ramos toma esta vía todos los días para ir a su trabajo desde el sur hasta la 6 de Diciembre y De los Granados. Su medio de transporte son las busetas que salen desde la av. Morán Valverde, en el sur, y finalizan su recorrido en la av. Eloy Alfaro, en el norte. El usuario comenta que antes de la construcción, desde la Casa de la Selección, ubicada en la av. Simón Bolívar, hasta la av. Granados las busetas se demoraba 8 minutos aproximadamente. “Ahora debemos esperar casi media hora para llegar al antiguo redondel”.
María Cedeño es moradora del sector y comenta que el tráfico se intensifica cuando los alumnos de la Universidad de las Américas (UDLA) acuden a su centro de estudios. “A pesar de que la entrada a la universidad no es por la av. Simón Bolívar hay más carros”, dice Cedeño.
La construcción del Intercambiador está a cargo de la empresa Semaica y forma parte del convenio público-privado del Proyecto Especial Centro de Desarrollo y Gestión Empresarial Ekopark-Universidad de las Américas (UDLA).
La obra tiene un costo aproximado de USD 8,5 millones; comenzó el 7 de noviembre del 2014 y se entregará a fines de junio del 2015.
Para los conductores, la construcción del intercambiador de El Ciclista generó alta congestión, pero no soluciona el serio problema de movilidad que existe desde hace años en el sector: el cruce de la av. De los Granados y Eloy Alfaro, por el cual los vehículos que ingresan al norte de Quito desde la Simón Bolívar.
Para evitar esa congestión, hay personas que se desvían por la calle De las Azucenas para tomar la calle De los Naranjos, donde hay alto flujo vehicular.