Perera, en la lidia de su primer toro. Conquistó al público de la capital antioqueña. Foto: EFE.
Con un cartel de toreros que prometía mucho, la tarde se saldó con una sola oreja para un Perera que despliega su formidable momento torero. El francés Sebastián Castella dio una vuelta al anillo. Alejandro Talavante dejó ir vivo a su segundo ejemplar
Era la cuarta corrida de abono y con algo más de tres cuartos del aforo vendido se corrieron ocho toros de La Carolina, nobles y con toreabilidad. El cuarto fue premiado con la vuelta al redondel y varios aplaudidos en el arrastre. El manejo de las espadas fueron la cruz de la tarde.
Abrió plaza Alejandro Talavante, urgido por viajar rumbo a México para otro compromiso, recibió a su buen primero con una serie larga de buenas verónicas y chicuelinas con toreros remates. El quite fue por talaveranas.
La faena la inició con ayudados por alto y alcanzó una labor muy templada en el toreo al natural. Dos buenas series de derechazos, molinetes y manoletinas de adorno hacían presagiar el corte de una oreja pero un pinchazo y una estocada contraria dejaron todo en una ovación. Palmas al toro en el arrastre.
Lo mejor en el segundo del lote del extremeño fue una serie de trincherazos ante un toro que se defendía y que no pudo matar y se dejó vivo. Abandonó la plaza en medio de los pitos del público.
El experimentado torero colombiano Sebastián Vargas no tuvo su tarde. Fue aplaudido en el quite por chicuelinas luego de lo cual, en dos puyazos, William Torres picó con torería. Entregado el diestro con banderillas con un par al violín, fue ovacionado.
Excelente el toro llegó a la muleta repitiendo y Vargas le hizo una faena derechista y sin ajustarse por la izquierda. Metisaca pinchazo y buena estocada. Palmas a los despojos del toro y ovación al picador.
Brilló el diestro colombiano en su segundo con las banderillas con un par al violín y otro, el de Calafias, arriesgado. El toro noble y rajado se hubiese prestado para el lucimiento pero el trasteo fue intermitente con algunos buenos muletazos y algunos circulares celebrados, sin solución de continuidad. Estocada y silencio.
Por verónicas saludó Castella al tercero que recibió un buen puyazo de Rafael Torres. Una faena de temple con varios muletazos en redondo y varias series de naturales de pasajes toreros. En su conocida puesta en escena de cercanías logró acople en el toreo en circular y tras un intento fallido con la espada dejó un pinchazo y una estocada caída. Ovación.
El torero de Francia pudo haber alcanzado un trofeo con su segundo al que recibió muy bien por verónicas y media. Un buen puyazo del varilarguero Doblado fue el preámbulo para un inicio de muleta sentado en el estribo en el que el toro se quedó corto. La faena continuó por derechazos de buen corte y naturales en las cercanías del toro. Pinchazo, estocada caída, fuerte petición y vuelta al ruedo aplaudida.
Tras el saludo capotero de Miguel Ángel Perera Paco Doblado dejó un largo puyazo. Luego de una voltereta al banderillero Juan Sierra volvió a brillar con los palos el colombiano Carlos Garrido. Vibrante inicio de faena , doblándose y con pases por alto del diestro que hilvanó una gran faena, con templados derechazos ante un toro que humilló mucho. Variado con la muleta siguió con un molinete y muletazos de las flores para insistir con clase y torería por el pitón derecho.
Soberbio y vibrante en el toreo al natural volvió a mostrar la plenitud que alcanzó mayor consolidación durante el 2014 en España y Francia. Con los pases de pecho en circular y nuevos pases de las flores cerró una faena de premio mayor con un pinchazo y una gran estocada trasera. Oreja al torero y vuelta al ruedo al toro.
El extremeño se lució con la capa en el último de la corrida que peleó bien ante el picador Luis Viloria. James Peña y Garrido banderillearon a gusto y tras dos estupendas series de manos bajas por el pitón derecho el toro se rajó llevándose la ilusión del público y del torero.
El próximo fin de semana esperan las corridas del cierre de feria en la Plaza La Macarena de Medellín.