En la foto, el alcalde Mauricio Rodas dando su discurso en la sesión solemne del Concejo Metropolitano de Quito. Foto: Jenny Navarro / EL COMERCIO
Redacción Quito
El Teatro Sucre, permitió la apertura para la sesión solemne por los 480 años de fundación de Quito. El Alcalde de la ciudad capital pronunció su discurso centrado en el tema del Metro de Quito y la propuesta que hizo al Gobierno.
Varias fueron las frases que Mauricio Rodas pronunció en sus 45 minutos de disertación. Estas son las principales.
“Tenemos la apertura suficiente para contemplar cualquier esquema que de alguna forma solucione la movilidad de los quiteños, con un sistema de transporte público subterráneo. Este Alcalde está dispuesto y hará todo lo posible para lograr que Quito tenga un sistema de Metro”.
“Quiero comprometerle Presidente a que tengamos lo más pronto posible otra reunión de trabajo. Y todas las que hagan falta, para que de manera eficiente definamos una solución a esta fundamental necesidad de los quiteños. Estoy convencido de que en conjunto encontraremos la solución que más convenga a los ciudadanos. A los dos nos mueve el objetivo superior de que los quiteños tengamos una solución”.
“Estamos dispuestos a diseñar y presentar tantas propuestas como sean necesarias, para encontrar esa solución en coordinación con el Gobierno Nacional”.
“Quito no es de un solo color, es de todos los colores. La nuestra es una Alcaldía para todos los colores, para todos los quiteños. Interpretando el sentir y la forma de ser de los quiteños y con una forma nueva de hacer política, hemos reemplazado la confrontación por el diálogo; el sectarismo por la tolerancia; la desconfianza por la confianza; el ataque por el trabajo y la función. Fuimos elegidos para resolver los problemas de los quiteños, no para enfrascarnos en polémicas inútiles”.
“Estamos convencidos que entre autoridades públicas debe primar siempre el diálogo respetuoso y constructivo. Así como la coordinación de acciones, más allá de diferencias que puedan existir y que son legítimas y enriquecen la democracia, pero no deben impedir la construcción de consensos que den paso a poner en marcha iniciativas para mejorar la calidad de vida del ciudadano. En esto radica la visión de madurez democrática, que venimos impulsando”.