Los médicos de la Tricolor tendrán una maleta de primeros auxilios, 280 tipos de medicamentos y materiales de curaciones en el Mundial de Brasil para atender a los seleccionados.
Estos implementos servirán para tratar desde un esguince de tobillo hasta un paro cardiorrespiratorio de los tricolores durante el torneo.
Patricio Maldonado, jefe médico de la Tri, y otros 31 galenos que estarán pendientes de 736 futbolistas en Brasil recibieron un seminario de la FIFA para conocer los implementos y los procedimientos a emplear con los jugadores en el certamen. El organismo más poderoso del fútbol instruyó a los especialistas con el propósito de evitar inconvenientes con los seleccionados -y sobre todo- para sortear casos de dopaje, algo que no ocurre en un Mundial desde 1994 cuando se suspendió a Diego Maradona.
El seminario y la planificación previos a la cita mundialista permitieron a Maldonado y a sus colaboradores definir la logística que se incluirá en el avión que llevará a la delegación ecuatoriana a Viamão, su sede en Brasil.
Las maletas de los médicos contendrán desde vendas personalizadas para los tobillos de los jugadores hasta desfibriladores -aparatos electrónicos para tratar paros cardiorrespiratorios-.
El material de curaciones de los médicos también incluirá esparadrapos, curitas, ultrasonidos, estimuladores… También se llevarán vendajes especiales para el tobillo del capitán Antonio Valencia, quien sufrió una rotura de la tibia y peroné en el 2010. “A ‘Toño’ lo protegemos con estos vendajes en la Selección desde que sufrió su lesión. Es algo indispensable para su juego”, reveló el galeno ecuatoriano.
Los medicamentos se llevarán desde Ecuador. La FIFA exigió a la Federación Ecuatoriana de Fútbol que enviara al Comité Organizador la lista de las medicinas con su nombre farmacológico, la empresa que los produce, su registro sanitario y su nombre genérico. Esto para detectar medicamentos prohibidos.
Otros puntos claves serán los implementos de hidratación. Para ello, cada galeno tendrá un maletín de agua.
Además, en Viamão, la delegación tricolor recibirá materiales para hidratar a los futbolistas. Ellos también contarán con personas encargadas de trasladarlos a centros de salud de Sao Paulo, Río de Janeiro, Porto Alegre y Minas Gerais en caso de inconvenientes médicos de los seleccionados.
Asimismo, los médicos de todas las selecciones deben tener listo el pasaporte biológico (una ficha médica) de cada uno de los 23 seleccionados para el Mundial. Por esto, la FIFA creó una comisión que irá a los países de las selecciones o a los lugares donde estas jueguen encuentros amistosos para realizar los controles.
Los controles del ‘doping’
Brasil no cuenta con un laboratorio de pruebas de dopaje acreditado por la Asociación Mundial Antidopaje (AMA). Por ello, las muestras de orina de los futbolistas serán enviadas a Lausana, Suiza, tras los controles.
La FIFA suspendió el laboratorio de Río de Janeiro porque no pasó los chequeos de la AMA. Pese a ello, Jiri Dvorak -director médico de la FIFA- dijo que el organismo contaba con los procedimientos para garantizar el traslado de las muestras hasta Europa, en un viaje que durará 36 horas.
En la Selección están conscientes de que cualquier jugador del equipo puede formar parte de uno de los 256 elegidos al azar para los controles. Por ello, mantienen contacto con los médicos de los clubes de los seleccionados. Así, conocen los medicamentos que han ingerido.
Esto les ayuda a tener la ficha médica de los jugadores.
280 medicamentos llevará la Selección a Viamão, su sede en el Mundial.