Eduardo Plascencia, chef mexicano
Eduardo Plascencia, apodado Lalo, es un investigador gastronómico aferrado en descubrir la técnica que hace la comida mexicana una de las más diversas. Además de la investigación Plascencia se ha dedicado como director académico del Instituto Técnico en Alimentos y Bebidas de Monterrey.
Para Plascencia es una responsabilidad del cocinero explorar su país y descubrir en ese pasado su espacio en la cultura gastronómica de hoy. Por ello la responsabilidad no cae solamente en los conocimientos culinarios que se conoce del pasado. La importancia está en cómo se aproxima a ellos hoy.
“Cómo los aplicas y visualizas en el futuro”, eso según Plascencia permite un desarrollo que deje de mirar los simbolismos y convierta la gastronomía en ciencia creativa pero real.
Plascencia disfuta de estos congresos porque son espacios en los que puede hablar sobre sus extensas investigaciones relacionadas a la nixtamalización, entre otaras especialidades. Pero sobretodo, así explica que ha llegado a comprender que en México es amplia la oportunidad de hacer cosas relacionadas a la comida.
“Yo siempre he sido de los que apuesta por el discurso de recuperar las tradiciones, de no perderlas, de mantenerlas. Pero poniendo énfasis en el cómo mantenerlas”, dice Plascencia.
Considera que es importante el simbolismo, la relación antropológica de la comida, pero ahora reflexiona que es momento de superar esa etapa y mirar hacia el futuro de la gastronomía.
“Yo siempre he tratado de ser un rompedor, un rebelde. Porque así está más divertida la vida. Si no te rompes a ti mismo cómo avanzas y es lo mismo en la gastronomía”, cuenta Plascencia.
El ingrediente principal para sustentar su punto es el maíz. Explica que lo ha escogido porque es parte de un proceso que ha dado sustento, base y fundamento a las sociedades pre hispánicas y mesoamericanas. “Lo que yo vine a hacer no es innovación necesariamente, por los 4000 años de historia pero para ustedes (Ecuador) probablemente si lo es”.
Así, más gente va entendiendo un poco más de México. Aún así se comprende que en México hacen falta toneladas de conocimiento por comprender, por hacerlo y difundirlo.