Redacción Cuenca
Con angustia, nerviosismo y los dientes apretados, en la cancha y en los graderíos. Así ganó 2-1, ayer, el Deportivo Cuenca a Liga de Portoviejo, en el estadio Alejandro Serrano, en cotejo válido por la décima fecha de la segunda etapa del torneo nacional de fútbol.
Pese a ser un día laborable, unos 4 500 aficionados llegaron al escenario para apoyar a su equipo. Unos asistieron vestidos con uniformes de sus empresas y colegios, otros con ropa casual y la mayoría estuvo identificada con los colores del club local.
Las formaciones
El ‘Expreso Austral’ alineó con Dreer; Narváez, Quiñónez,
Ianiero, Bohórquez; Ramos, García (TA), Matamoros, Paredes; Teixeira (TA) y Preciado.
Liga de Portoviejo formó con Mendoza; Gómez, Triviño, Ojeda, Paredes (TA); Quintana, Cedeño, Bejarano (TA), Molina (TA); Vélez y Jijena.
Con el triunfo, Dep. Cuenca sumó 15 puntos en la segunda etapa (grupo 1) y contabilizó 41 unidades en el acumulado. Salió de la zona del descenso y su meta es llegar a la liguilla final.
Su próximo rival es El Nacional, que tiene 11 puntos en la segunda etapa y 40 en el acumulado. Es su rival directo en su afán de ingresar a la tercera fase.El gol del delantero Édison Preciado, marcado a los 26 minutos, lo festejaron a todo pulmón en los sectores de general, tribuna y palco. La anotación llegó tras un centro, desde el costado derecho, del volante Juan Carlos Paredes. Un potente remate de Preciado quebró la resistencia del golero manabita, Manuel Mendoza.
Preciado festejó al estilo del ‘Chavo del Ocho’, con su conocida garrotera. Su compañero, el arquero alterno Israel Álvarez, salió desde la banca para lanzarle agua con una botella plástica y volverlo a la normalidad. El público coreó su apellido: “Preciado…”.
Hasta antes de la conquista y gran parte del primer tiempo, el ‘Expreso Austral’ buscó el arco contrario y Liga de Portoviejo se defendió con orden y contragolpeó. El argentino Daniel Jijena fue el único que inquietó al arquero local Esteban Dreer.
Las jugadas colectivas entre Holger Matamoros, Paredes, Preciado y el brasileño Rodrigo Teixeira fueron el punto de desequilibrio del cuadro azuayo. Pero los dirigidos por Paúl Vélez fallaron en la definición y pecaron de individualistas: eso causó malestar.
Desde el inicio de la segunda etapa, el técnico argentino Oswaldo Morelli puso al delantero Manuel Cotera en reemplazo del defensa Armando Gómez. Ese cambio le dio fuerza ofensiva al conjunto portovejense. Después (59’) ingresó al volante boliviano Daner Pachi por Lenin Cedeño.
Con esas dos variantes, al parecer, a Morelli le daba igual perder con un gol que con una goleada.
Cuando más atacaba el equipo visitante, el Dep. Cuenca sorprendió con una segunda anotación al minuto 66. Teixeira recibió un pase con el pecho de Preciado, dentro del área y con toque sutil venció al meta Mendoza.
Tras ese gol, el técnico Vélez tomó precauciones defensivas. A los 71 minutos sacó a Matamoros y puso al zaguero Juan Guerrón. El visitante se fue con todo y marcó el gol de descuento a través de Cristian Márquez, al minuto 75.
En los últimos 15 minutos ingresaron el defensa Marlon Moreno por Paredes y el volante José Granda por Teixeira.
Los 3 minutos de descuento fueron de angustia. Los hinchas se comieron las uñas y los futbolistas se dieron modos para demorar la reanudación de juego.
Y no era para menos. Con el triunfo, Dep. Cuenca se alejó del descenso y se puso en la pelea para ir a la liguilla. Por eso, al final, los abrazos fueron en los graderíos y en el campo de juego.