Bogotá, DPA
Colombia no descarta retirarse de la Unión de Naciones Sudamericanas (Unasur) si el grupo limita su agenda al tema del acuerdo militar entre Bogotá y Washington y no la abre a asuntos como la compra de armas o la lucha contra el terrorismo, dijo hoy el ministro de Defensa, Gabriel Silva.
El funcionario, no obstante, expresó que confía en que el bloque sudamericano pueda superar las diferencias actuales para “enderezar el camino”, tras las dificultades observadas ayer durante la reunión de los ministros de Relaciones Exteriores y de Defensa de la Unasur, en Quito.
En la capital ecuatoriana se discutió el acuerdo entre Colombia y Estados Unidos, como continuación de la reunión presidencial celebrada en Bariloche (Argentina), en medio de la insistencia colombiana para que otros temas sean puestos sobre el tapete.
Al final, la reunión fue levantada sin acuerdos y el ministro del Exterior ecuatoriano, Fander Falconí, dijo que ello se debió a la posición de Colombia de consultar “a un tercer país” sobre la apertura de detalles del polémico convenio militar.
Silva dijo que espera que los miembros de la Unasur acepten ampliar la agenda, tras describir el encuentro en Quito como “tenso y difícil”.
Asimismo, expresó a la cadena radial Caracol que su país no descarta un retiro del bloque si las discrepancias se prolongan y algunos países, en tácita referencia a Venezuela, se empeñan en que solamente se discuta el tema del acuerdo entre Colombia y Estados Unidos sin incluir aspectos como las compras de armas.
“Si este ‘impasse’ se perpetúa, si no vemos una preocupación por el armamentismo, el tráfico de armas, el narcotráfico, si no hay sensibilidad por esos temas, estaríamos como invitados de piedra y ahí sí tocaría evaluar esa posibilidad (del retiro)”, afirmó Silva.
El ministro dijo que Ecuador, que preside la Unasur, convocará a otra reunión que debería realizarse en una semana y media para seguir las deliberaciones. Al responder las críticas de Venezuela sobre el supuesto ocultamiento del acuerdo, Silva dijo que Colombia lo revelará cuando se terminen de surtir trámites internos, paso previo a la firma.
En ese sentido recordó que el texto es estudiado actualmente por el Consejo de Estado, aunque condicionó su publicación al tratamiento “simétrico” de los temas de seguridad y defensa en la Unasur.
“La región tiene que preocuparse por la dimensión del gasto militar”, expresó el ministro, tras destacar que mientras Venezuela habla de “hipotéticas amenazas” por dicho acuerdo, Colombia considera que sí tiene “amenazas concretas” en su contra por el anuncio venezolano de compra de armas a Rusia. Silva dijo que Colombia está modernizando aviones y embarcaciones de guerra con más de 30 años de uso y que no tiene previsto adquirir armas en la actual coyuntura.
“No nos vamos a dejar tentar por los vecinos para comprar jugueticos amenazantes”, aseguró.
Por su parte, el ministro de Relaciones Exteriores de Colombia, Jaime Bermúdez, coincidió con Silva en que el acuerdo que será firmado con Estados Unidos se divulgará cuando concluyan todos los trámites y recordó que un artículo deja claro que se circunscribe a territorio colombiano y no debe ser visto como una amenaza regional.
Bermúdez dijo que tanto en la reunión presidencial de Bariloche como en la ministerial de Quito se vieron “interpretaciones con hipersensibilidad y con sesgos ideológicos” en torno al acuerdo entre Bogotá y Washington.