PEKIN, Reuters
China no dio señales el viernes de que planee retirar pronto sus políticas de estímulo económico, al comprometerse a mantener una postura en favor del crecimiento durante el 2010, para amortiguar los efectos de la crisis financiera. Un encuentro del Partido Comunista ratificó su política monetaria relativamente relajada y la activa política fiscal adoptadas hace un año luego de que la crisis alcanzara su cúspide, pero dijo que existía la necesidad de implementar una flexibilidad en las políticas.
El Politburó del partido se comprometió a que el crecimiento sea más estable, más sostenible y más equilibrado, reportó la agencia de noticias oficial Xinhua. Con ese fin, China promoverá una demanda doméstica sostenible, especialmente en consumo e inversión privada, un incremento de las importaciones y alentará a las empresas a invertir en el extranjero, según el sitio web de CCTV, el principal canal de televisión estatal.
“Nuestra tarea primaria en el trabajo económico debiera ser mantener un desarrollo relativamente rápido y estable, adhiriendo a una política fiscal activa y una política monetaria apropiadamente relajada”, dijo CCTV en un resumen de la reunión. Qing Wang, economista de Morgan Stanley, dijo que el anuncio era consistente con su opinión de que China volverá a un ritmo más moderado de crecimiento del crédito en el 2010.
Pero es poco probable que eleve las tasas de interés o los ratios de requerimientos de reservas de los bancos antes de mediados de año. “La postura de política súper-relajada se va a normalizar, pero se mantendrá en general apoyadora en el 2010”, agregó en una nota. Los resúmenes de la reunión no hicieron referencia al manejo de las expectativas inflacionarias, que el Consejo de Estados o gabinete, dijo el mes pasado que sería una prioridad.
La omisión parece ser una señal de que Pekín está más comprometido con mantener las políticas de estímulo. “Esto indica que el Gobierno está confiado en que el nivel de precios en general será controlado el próximo año y que la inflación es un riesgo relativamente lejano para la economía”, comentó Qi Jingmei, economista del gubernamental Centro de Información Estatal.
También se notó la ausencia de una mención al yuan, la moneda china, luego de que Estados Unidos, la Unión Europea y el Fondo Monetario Internacional han apuntado recientemente a la moneda por estar subvaluada y, como tal, por haber contribuido a los desequilibrios económicos mundiales.