Redacción Manta
La fase de promoción y difusión sobre los beneficios del proyecto petroquímico en El Aromo tiene ocupado a un grupo de 15 técnicos de la empresa Petróleos de Venezuela (Pdvsa) y Petroecuador. Está previsto que en este sitio se construya la Refinería del Pacífico.
Carlos Proaño, gerente del proyecto, señaló que en el momento se realizan visitas en las 16 comunidades rurales de Manta y Montecristi.
Los talleres
Las oficinas donde trabajan técnicos venezolanos y ecuatorianos están ubicadas en el centro comercial Plaza del Sol, en el centro de Manta.
En las comunidades rurales de Manta y Montecristi los habitantes asisten a las charlas para difundir el proyecto.
Los temas relacionados con el agua, salud y tierras son tratados entre los comuneros y los técnicos de la refinería del Pacífico. Los vecinos piden opciones de trabajo. A los habitantes de esos recintos les preocupan temas como el del agua. La razón es que, inicialmente, se dijo que el líquido se extraería de las fuentes subterráneas del valle de Puerto Cayo. También se habla de que se construiría un acueducto para traer agua desde la represa de Poza Honda.
Para Proaño son rumores que no tienen ninguna posibilidad de convertirse en realidades. Señaló que el proyecto se abastecerá de agua que será procesada por plantas desalinizadoras. Estas serán construidas en la refinería. “El líquido también será compartido con los habitantes de las poblaciones vecinas”.
Luego de que concluyó el levantamiento topográfico, en este mes se iniciará la fase de ingeniería básica. Antes de diciembre se dará a conocer dónde se ejecutará el proyecto. Proaño adelantó que será en un lugar muy retirado de la zona de El Aromo.
Para julio de 2010 está previsto que empiece el movimiento de tierras. Desde entonces, habrá un plazo de 66 meses para que culminen los trabajos.
Manuel Delgado vive en el poblado de Pacoche. Él aspira a que una vez que empiecen los trabajos, la gente de las comunidades sea tomada en cuenta para el desarrollo de tareas de índole artesanal, por lo menos.
En toda la zona de influencia, donde se planifica levantar la refinería, la gente se dedica a las labores agrícolas y ganaderas.
Delgado recuerda que cada año deben afrontar la sequía. “Con ese problema de por medio no es justo que nos quiten más agua para la refinería”. El costo del proyecto será de USD 12 500 millones.