Pablo Fiallos. Redactor
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James Cameron sabe cómo convertir a un relato en un discurso grandilocuente y vistoso, y muchas veces excesivo. En 1997 recreó la tragedia del Titanic, explotando al máximo el desastre, a través de los recursos audiovisuales, redujo al mínimo el hecho histórico, simplificando en un romance melodramático.
La ficha técnica
Título: ‘Avatar’
Guión y dir.: James Cameron
País: EE.UU.
Año: 2009. Dur.: 162 min.
Género: Fantasía
Reparto: Sam Worthington, Zoë Saldana, Sigourney Weaver y Michelle Rodriguez
Música: James Horner
Foto.: Mauro Fiore
Se presenta en: Cineplex, Cinemark, Multicines y Supercines
Su última, y muy esperada película, ‘Avatar’, vuelve a jugar con ambos conceptos. Por un lado, el filme muestra al Cameron más sorprendente. Su habilidad como director, su imaginación como creador y su propuesta comercial como productor se evidencian en un majestuoso y alucinante viaje por mundos desconocidos. El director narra una historia perdida en el cosmos, en la cual logra juntar presente, pasado y futuro.
Por el otro lado, ‘Avatar’ es el filme totalitario que no logra superar las fórmulas del romance prohibido, pero realizable, de la resistencia del débil ante el más fuerte y de la muy reconocible trayectoria del héroe-rebelde, que supera todo obstáculo.
El director de ‘Terminator’ domina a la perfección los códigos del cine de entretenimiento y logra emocionar al espectador en las casi tres horas que dura el filme, a base de simbolismos narrativos, magnificados a través de los efectos especiales.
‘Avatar’ intenta plasmar los problemas del mundo contemporáneo a través de la ciencia ficción, en un maravilloso mundo de fantasía. Esta es la mayor virtud de la cinta de Cameron: sugerir una realidad (actual y presente), en la cual el individuo puede caminar, a pesar de ser inválido, y convivir con el resto, a pesar de estar ausente.
Cameron se refiere a la virtualidad del mundo electrónico de hoy. Lo sitúa en un planeta lejano, donde viven unos seres conectados a la naturaleza, que remiten directamente a los pueblos originarios de la Tierra.
Con una enérgica intención ambientalista, Cameron replantea el tema de la colonización y el genocidio, perpetuados históricamente por el hombre, a partir del uso metafórico de los alienígenas. El director cuenta una nueva historia de saqueo, de sobreexplotación de recursos naturales, a partir de poderosos ejércitos que, sin conciencia, acaban con otros pueblos para asegurar su propia existencia.
En este caso, los humanos buscan un poderoso mineral que existe en Pandoria, el planeta donde habitan los Na’vi, unos seres gigantes y azules que viven en armonía con el medioambiente. Allí tratarán de extraer un mineral que puede resolver la crisis energética que vive la Tierra. Para ello envían a un soldado, convertido en Na’vi, para conocer sus debilidades. Sin embargo, su misión entrará en peligro cuando se enamore de la hija del jefe de los Na’vi.
Visual y conceptualmente, ‘Avatar’ es un filme entretenido y que, por momentos, logra interesar por su tratamiento. Sin embargo, la falta de profundidad de la premisa y la previsibilidad de la historia evidencian la apuesta de Cameron, dirigida más al entretenimiento que a la reflexión.