Redacción Ecuador
Desde la tarde del pasado martes, la calle 6 de Marzo se volvió intransitable para los automotores. La causa es la gran cantidad de personas que llegan a ese sector del centro-sur de Guayaquil.
Como ocurre desde hace varias décadas, allí la confección y venta de años viejos transforma a esa concurrida vía en una enorme vitrina donde se exhibe el trabajo de los artesanos.
A lo largo de 17 cuadras, desde la calle Manabí hasta Portete, en ambas aceras y en las intersecciones, centenares de personas se dedican a este oficio. Con cartón, papel, almidón, madera y pintura dan forma a verdaderas obras de arte. Este es el principal punto de comercialización de los monigotes en la ciudad.
Las ventas concluirán esta noche, cuando los monigotes que no se vendieron vayan a ‘remate’.
Raúl García no se queja del negocio en este año. Dice que ha vendido casi todos los 40 muñecos que hizo hace dos meses, entre USD 5 y USD 40.
Oswaldo Suárez, en cambio, espera que hoy la suerte cambie. “No se está vendiendo como esperábamos. Ahora, solo he vendido 20 ‘viejos’. El año pasado, a esta fecha, ya había vendido 50”.
Una queja similar tiene Alexandra Morocho. En la intersección de Gómez Rendón acomoda un monigote de ‘Hulk’, por el cual pide USD 30. “Venga, puede ofrecer”, dice con insistencia.
Hasta el martes vendió siete años viejos. El año anterior, en estos días, ya tenía comercializados 20. “Ahora, hay mucha competencia”, acota. Al igual que hace cinco años, desde abril comienza a confeccionar, poco a poco, los monigotes. Sin embargo, ahora solo elaboró 70 muñecos.
Allí, en esa tradicional calle, el colorido, el movimiento de gente, la bulla, los muñecos de todo porte predominan. Figuras como Michael Jackson, el presidente Correa y el alcalde Nebot están entre los más vendidos.
También están otros personajes como Antonio Valencia, Hulk, Dragon Ball Z, Pucca, Chucky, Spiderman, Gepardo, Elmo, Monster vs Aliens, Los Simpson, Hugo Chávez, Pokemon, El Chavo…
Incluso, llama la atención la presencia de ciudadanos extranjeros que, con filmadora y cámara fotográfica en mano, llegan para captar imágenes con los monigotes. Pero, para eso deben pagar entre USD 0, 25 y 0,50
Pero, ese no es el único punto de la urbe donde se comercializan masivamente los años viejos. La avenida Pareja Rolando, en La Alborada, se ha convertido en otro sitio tradicional. Desde mediados de diciembre, al menos un centenar de comerciantes se ubican tanto en las dos aceras como en el parterre central.
Lucía Ortega no deja de ofrecer sus monigotes, ni cuando da de lactar a su pequeña hija de seis meses. “La gente viene, pregunta y se va. hay quienes quieren muñecos de USD 2”. Los precios de los muñecos, que los empieza a elaborar desde junio, varían entre los USD 5 y 35.
En la av. Isidro Ayora, frente a Sauces VI, una veintena de artesanos ofrece sus productos. Ellos se quejan de que las ventas están bajas y confían en que mejorará hoy, último día del año.
Los vendedores también están en la av. Carlos J. Arosemena, en el noroeste. Los exteriores del Centro Comercial Albán Borja también concentran las ventas.
Otro grupo de comerciantes logró, desde el martes, ingresar a la explanada del estadio Modelo. Allí, el Cuerpo de Bomberos había prohibido las ventas.
El Municipio aclaró que no se les otorgó el respectivo permiso y que el único sitio autorizado para la venta masiva de años viejos es la calle 6 de Marzo.