Redacción Agromar
Eso afirmó Josef Schmidhuber, de la FAO y miembro del Panel Intergubernamental sobre Cambio Climático.
Según Schmidhuber, con una subida pequeña en la temperatura, las áreas de las latitudes más altas pueden beneficiarse del cambio climático con un aumento de la productividad y de la tierra apta para la agricultura.
Esta podría crecer hasta 160 millones de hectáreas. En contraste, en las regiones de latitudes bajas la productividad debería caer y la cantidad de tierra cultivable podría bajar hasta 110 millones de hectáreas.
Según estimaciones, un incremento en la temperatura global promedio de hasta 2,5 grados puede aumentar la productividad y producción mundial.
“El problema es que la mayoría de los países pobres y en desarrollo está en latitudes más bajas. Muchos ya enfrentan situaciones de inseguridad alimentaria y el cambio climático dificultará la producción”, dijo.
Este experto también destacó el potencial que la agricultura tiene para mitigar los efectos negativos del cambio climático, a través de acciones como la agricultura de conservación.
Al analizar los mercados, el profesor de Economía Agrícola de la Universidad de California (Berkeley), Brian Wright, afirmó que los países no pueden depender de la importación y deben mantener reservas de alimentos para soportar cuando los precios están más volátiles.