Edmundo Vera Rodríguez
Si usted cree que con hacerme una rebajita del 10% a mi cuenta de energía eléctrica me va a contentar y “compensar” todos los daños ocasionados por los apagones que su gobierno imprevisivo e inepto no supo evitar, yo le digo “no gracias, señor Presidente”.
Y lo mismo creo que le va a decir una gran mayoría de ecuatorianos, que ya se está cansando de sus acciones demagógicas y limosneras, que pretenden compran conciencias con migajas tiradas al piso.
Yo más bien le digo: suba las tarifas, señor Presidente. Por que el peor error que ha podido cometer es rebajar las tarifas de luz sin que nadie se lo haya pedido, solo para congraciarse con la gente. Con esa gente que ahora acumula miles de artefactos dañados por culpa de los apagones, y millonarias pérdidas por no poder atender normalmente en sus pequeños negocios, pérdidas que son infinitamente mucho mayores al puñadito de dólares que a lo sumo ha ahorrado durante este tiempo de vigencia de “tarifa solidaria”.
Suba las tarifas, para que deje de desfinanciar y llevar a la ruina al sector eléctrico, al que no le ha invertido el dinero suficiente como para evitar esta crisis energética.
A mí, y a cualquiera que tenga capacidad de sumar y restar, más que pagar cuatro dólares menos en luz al mes, nos interesa trabajar con normalidad. Con 12 horas menos de electricidad por semana y 50 horas laborables menos al mes, yo pierdo no menos de mil dólares en ingresos mensuales. Y aparte, tengo un carro con el cerebro dañado por tener que conectarle una ‘laptop’ para trabajar en él durante los apagones. Me apresto a llevarles una carta al Ministerio de Energía para exigirles que me reconozcan el altísimo costo de ese repuesto, y el de la alarma de mi casa que también se arruinó. Y exhorto a todos los ecuatorianos a hacer lo mismo con todos los daños y perjuicios ocasionados por este Gobierno imprevisivo.
Entonces, por mí, que no me cobren USD 40 mensuales en energía eléctrica. Que me cobren USD 60, que cubran los costos reales de darme luz, pero que me aseguren que nunca más nos van a tener a oscuras, impedidos de producir con normalidad.
Por ahí, señor Presidente, comience a practicar la solidaridad que tanto cacarea.
De la UTE
Álvaro Trueba Barahona, Rector de la UTE
Esta misiva tiene como objetivo referirme al reportaje del cuaderno 3, página 25, de la sección Deportes.
En la parte pertinente señala textualmente: “La UTE gastó USD 250 000 en subir a la B”.
Este titular, a pesar de que en estricto carácter formal es cierto, es también incompleto. Esto por dos motivos específicos:
El Club o UTE es una unidad independiente de la Universidad Tecnológica Equinoccial, que tiene su propia personería jurídica y que por lo tanto es un ente autónomo, tanto en su parte directiva como en el manejo y generación de sus recursos.
Si bien la Universidad Tecnológica Equinoccial aporta económicamente al Club, no es menos cierto que dicho aporte no representa, ni de lejos, un porcentaje importante de los USD 250 000 a los que hace alusión la nota.
Por estas razones, me permito solicitarle que se haga la aclaración de este tema, puesto que está generando falsas expectativas en nuestra comunidad. Esto debido a que el aspecto deportivo no es la prioridad de inversión de la Universidad Tecnológica Equinoccial y una cifra de estas características puede hacer pensar lo contrario.