Redacción Construir
“No da lo mismo comprar un departamento en cualquier piso con cualquier orientación. El valor es diferente sencillamente por los diversos beneficios que presentan las unidades respecto de la ubicación interna en el proyecto”.
Esto lo saben muy bien los agentes inmobiliarios. Por eso, cuando venden las viviendas fijan un precio diferente a cada unidad según su emplazamiento interior. El comprador debe tomar en cuenta algunas condiciones dadas por la localización del inmueble dentro del edificio, continúa Almeida: “Una de ellas, y tal vez la más conocida, es la orientación. En Quito, por ejemplo, una propiedad ubicada hacia el oriente del edificio cuenta con una animosa luz matinal; cuando se localiza en el poniente se tendrá un sol que vislumbra durante la tarde y que suele sofocar. En tanto, las ubicaciones norte y sur tienen menos sol, ya que las ventanas están en la cara sombría”.
Considerar esto antes de comprar una propiedad es clave, explica el profesional, ya que cuando se desee arrendarla o venderla incidirá en su valor futuro o plusvalía. La altura es otro de los elementos determinantes en el precio. Los pisos superiores son más caros que los inferiores.