Redacción Guayaquil
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Los rosetones, los balcones y ventanales, los arcos de media punta y las cornisas con molduras trasladan a la época del Guayaquil cacaotero. Ahora es la matriz de almacenes Juan Eljuri.
El interior también tiene ese perfil ecléctico producto del ‘boom’ cacaotero, pero con algunas adiciones propias de la era tecnológica que vive el mundo.
Al atravesar los pilares de la esquina de 9 de Octubre y Boyacá, en pleno centro regenerado, el tiempo se acelera. Las puertas automáticas dan acceso a una estructura moderna, inspirada en centros comerciales europeos.
Las escaleras eléctricas forman una especie de cruz que contrasta con las ondas que forman los balcones interiores. Grandes arcos adornan los pisos de exhibición.
La iluminación natural es el eje arquitectónico de la rehabilitación del inmueble, construido en 1927. La cúpula que está en el último piso es ahora el centro de luz del minicentro comercial.
Todas estas sumatorias vanguardistas son producto de la actualización de ese edificio patrimonial a su nueva función comercial, explica Roberto Doumet, director comercial de Almacenes Juan Eljuri.