Italia comienza hoy a defender el título que obtuvo hace cuatro años en Alemania enfrentándose a Paraguay, en el debut de ambos equipos en el Mundial de Sudáfrica. Pero los actuales monarcas no son considerados favoritos.
El propio técnico italiano, Marcello Lippi, admitió que la ‘azzurra’ no llega esta vez con la aureola de favorita al señalar que muchas miradas apuntan más bien a Brasil y España. Sin embargo, corrigió de inmediato y ni bien llegó a la sede del Mundial aseveró: “Estamos aquí para salir campeones”.
Uno de los hombres emblemáticos de la Italia de los últimos tiempos, el lateral Gianluca Zambrotta, dijo que ese escepticismo a la postre resulta favorable porque motiva a los jugadores.
“Antes del Mundial del 2006 también creían que solo llegaríamos a octavos de final”, recordó el jugador.
La cita orbital en tierras africanas sería histórica para Italia si empata a Brasil con un pentacampeonato. Por lo pronto, será la despedida de los Mundiales para veteranos como Gennaro Gattuso y Fabio Cannavaro.
Lippi ha tenido problemas desde que llegó a Sudáfrica por dolencias que han afectado a Daniele de Rossi, Andrea Pirlo, Giorgio Chiellini y Claudio Marchisio. Pero si en Italia llueve, en Paraguay no escampa.
El seleccionador Gerardo Martino también afronta problemas por lesiones que han afectado en los últimos días a los atacantes Roque Santa Cruz y Óscar Cardozo.
Desde su sitio de concentración en Pietermaritzburg, los paraguayos reconocieron que han sentido la ansiedad no solo por tratarse de su primer partido en el Mundial, sino por el hecho de enfrentar al actual campeón.