La última Feria Internacional del Libro de Guayaquil tuvo más de 25 000 visitantes. Foto: Joffre Flores / EL COMERCIO
En el primer trimestre del 2018, si la Secretaría Nacional de Planificación (Senplades) aprueba el proyecto de inversión elaborado por Édgar Allan García y Antonio Correa Losada, Ecuador dejará de ser oficialmente el único país de la región sin un Plan Nacional del Libro y la Lectura.
García, director del plan, contó a este Diario que el monto aproximado que se pidió es de USD 50 millones, para cuatro años de gestión. Dentro de la inversión del primer año, según un resumen del plan que está en la página web del Ministerio de Cultura y Patrimonio, se contempla, entre otros, la edición de 40 títulos de publicaciones de autores locales y extranjeros; 150 procesos de formación lectora; ocho campañas comunicacionales ejecutadas a escala nacional; 40 títulos distribuidos a escala nacional e internacional; 100 bibliotecas nacionales fortalecidas y 1 150 bibliotecas comunitarias dotadas de publicaciones.
El Plan Nacional del Libro y la Lectura José de la Cuadra fue presentado a mediados de septiembre en Ibarra. Según García, la iniciativa recoge insumos entregados por la Asociación Ecuatoriana del Libro Infantil y Juvenil Girándula; las autoridades de la anterior administración del Ministerio de Cultura, y Zonacuario.
Entre las metas, a corto plazo, de este plan están la formación y la capacitación de bibliotecarios. Eduardo Puente, director de la biblioteca del Instituto de Altos Estudios Nacionales (IAEN), sostiene que actualmente el 75% de bibliotecarios del país tiene una formación empírica.
“Es importante -dice- que dentro del plan se incluya la capacitación a bibliotecarios porque son mediadores de lectura. Por lo tanto tienen que tener todas las herramientas epistémicas y metodológicas para realizar esa mediación”.
Dentro de este plan también se estableció la necesidad de promover la aprobación de una Ley del Libro en el Ecuador, con el objetivo de que se favorezca de forma efectiva la importación, publicación y distribución de los libros dentro y fuera del país.
A criterio de Puente, es necesario que exista esta ley, que fue derogada en la Ley Orgánica de Cultura, y agrega que esta necesita estar vinculada a una ley sobre bibliotecas. “Debe existir una articulación entre las dos leyes. Ecuador es uno de los pocos países del mundo cuya Biblioteca Nacional no es considerada como Depósito Legal. El 10% del tiraje que hacen los autores y las editoriales deberían estar en el depósito de esta biblioteca”.
Alejandro Bustos, director de Zonacuario, sostiene que en el país existe un serio problema de distribución de libros en el ámbito privado y público. “A veces queremos llegar con donaciones de nuestra revista y de nuestros libros a espacios alternativos de lectura y se dificulta por aspectos tributarios. Básicamente tenemos que pagar para donar”, cuenta.
García explica que en los últimos tres meses del 2017 se realizará una campaña de difusión sobre el Plan Nacional del Libro y la Lectura. Uno de los espacios que se aprovechará es la X Feria Internacional del Libro de Quito, que se realizará en noviembre y cuya provincia invitada es Manabí. La primera acción concreta del plan es la inclusión de 16 páginas llenas de poemas y cuentos en los libros del área de lengua y literatura de los textos del Ministerio de Educación.