Si el Parlamento aprueba el informe, el Ejecutivo podrá denunciar el tratado en cuyo caso surtirá efecto dentro de seis meses. Foto: Patricio Terán / EL COMERCIO
La Comisión de Relaciones Internacionales de la Asamblea aprobó hoy, martes 10 de septiembre del 2019, el informe que recomienda la denuncia del tratado Constitutivo de la Unión de Naciones Sudamericanas (Unasur).
El documento fue aprobado con los votos de ocho de los 12 asambleístas que forman parte de la mesa parlamentaria: Fernando Flores, César Carrión y Pedro Curichumbi, de la bancada de CREO; René Yandun y Encarnación Duchi, del Bloque de Integración Nacional (BIN); Fafo Gavilánez, de Alianza País (AP) y Fabricio Villamar (Ahora). Además de Denis Marín, del PSC.
Los correístas Augusto Espinosa y Lexi Loor se retiraron de la mesa cuando el presidente de la mesa, Fernando Flores, dispuso someter a votación el informe. Mientras que sus coidearios Esther Cuesta y Yofre Poma no acudieron a la sesión.
Espinosa adujo que el documento fue tratado “con ligereza y apresuramiento” y sin dar paso a un profundo debate. Lo que fue rechazado por Flores, quien acusó al correísmo de boicotear el trabajo de la Comisión.
El expediente será remitido al presidente de la Asamblea, César Litardo (AP), quien deberá ponerlo a consideración del Pleno. Para su aprobación se requiere de 70 votos de entre los 137 legisladores.
Si el Parlamento lo aprueba, el Ejecutivo podrá denunciar el tratado en cuyo caso surtirá efecto dentro de seis meses. Ecuador suspendió su participación en Unasur hace 11 meses.
Entre sus conclusiones, el informe señala:
La Unión de Naciones Suramericanas (UNASUR), nació con una gran debilidad, ya que este foro se conformó como un proceso liderado por los Gobiernos y no como un proyecto de Estados.
Se puede evidenciar que no se ha cumplido el objeto del Tratado de la Unión de Naciones Suramericanas, cuya finalidad era construir de manera participativa y consensuada, un espacio de integración y unión en diferentes dimensiones.
Hasta la presente fecha, los países de Colombia (31 de agosto de 2018), Brasil (17 de abril de 2019), Paraguay (11 de abril de 2019), Argentina (17 de abril de 2019), Perú (28 de mayo de 2019), Chile (11 de junio de 2019); y, finalmente Ecuador (19 de marzo de 2019), han denunciado el Tratado Constitutivo de la Unión de Naciones Suramericanas (UNASUR), con lo cual se evidencia que de 12 países que suscribieron el acuerdo ya existen siete denuncias y tan solo cinco países aún continúan dentro del Tratado, por lo que no se puede hablar de Integración Latinoamericana.
La decisión de Denuncia del Tratado, obedece a las funciones constitucionales establecidas en el Artículo 420 de la Constitución de la República del Ecuador, que establece: “la denuncia de un tratado aprobado corresponderá al Presidente de la República” en este orden de ideas, y en pleno ejercicio de esa potestad, el Presidente Constitucional de la República de nuestro país decidió Denunciar el Tratado.
La Unión de Naciones Suramericanas mantuvo una estructura institucional y estuvo conformada por 12 consejos ministeriales, donde su gestión era supeditada a los intereses de los gobiernos de turno en los países miembros, dejando de lado su afán integrador.
La debilidad en su naturaleza y la cooptación ideológica, generaron que la estructura institucional de UNASUR, no obtenga resultados tangibles para la ciudadanía y no se puedan cuantificar los beneficios que traían las reuniones de autoridades de gobierno para las poblaciones vulnerables, las empresas, o cualquiera de los demás sectores sociales.
Es oportuno mencionar que es inviable continuar en este organismo, ya que las causas de la parálisis de la UNASUR se encuentran en las diferencias políticas, la burocracia y el esquema rígido, lo que impide a los países nombrar a un sucesor.