Carla González Aranda es hija de Marcela Aranda, una activista que impulsó en julio el traslado a Chile del autobús del movimiento ultracatólico español Hazte Oír, que recorrió el país haciendo campaña contra la homosexualidad y la identidad de género. Foto: Facebook / Movilh
La hija transgénero de la promotora de una campaña anti Lgbti en Chile anunció este martes 28 de noviembre de 2017 que cambiará de identidad sexual, un día después de que su madre acusara al Movimiento de Liberación Homosexual (Movilh) de inmoral por publicitar el caso.
La joven transgénero, de 19 años, que emprenderá el proceso de cambio de nombre y sexo legal, dijo que decidió dar a conocer su decisión “para brindar apoyo a quienes están pasando por una situación parecida a esta”.
“Se puede salir adelante sin importar las circunstancias”, afirmó Carla González Aranda, hija de Marcela Aranda, una activista que impulsó en julio el traslado a Chile del autobús del movimiento ultracatólico español Hazte Oír, que recorrió el país haciendo campaña contra la homosexualidad y la identidad de género.
La joven transgénero dijo en rueda de prensa junto al presidente del Movilh, Rolando Jiménez, que la llegada del autodenominado ‘Bus de la Libertad’ a Chile no tuvo que ver en su proceso.
Carla comentó que hace unos tres años que no tiene contacto con su familia y que se sintió “discriminada” por el movimiento que lideró su madre. El lunes, Marcela Aranda adelantó el anuncio de Carla, advirtiendo que seguirá amando a su “hijo”, al tiempo que denunció animosidad del Movilh en el caso.
“El uso de su persona, imagen e intimidad es una estrategia cruel e inmoral para conseguir sus objetivos. No les importa exponer y dañar la vida de mi hijo”, reclamó. La llegada del bus homofóbico desató el rechazo del gobierno de la socialista Michelle Bachelet, que se mostró contrario a su mensaje pero no pudo negar al vehículo el derecho a circular.
La respuesta del Movilh fue sacar a la calle en simultáneo un “bus de la diversidad”. El gobierno de Bachelet impulsa una agenda de reformas sociales que busca aprobar una ley de identidad de género que permita que las personas trans sean identificadas legalmente con el nombre y sexo que representan.
Asimismo, Bachelet dio un paso más y en agosto envió al Congreso el proyecto de ley de matrimonio igualitario, cuya discusión comenzó esta semana tras aprobar en 2015 el Acuerdo de Unión Civil que permitió legalizar las parejas homosexuales, pero que no legisla sobre adopción.