El grupo Arrastra Teatro define como una “farsa épica” La plaga del baile, que presenta este 12, 13 y 14 de junio en el Teatro Sánchez Aguilar. Foto: Gabriel Proaño / EL COMERCIO
Una epidemia de baile azotó Estrasburgo (Francia) en julio de 1518. Centenas de personas bailaron fervorosamente durante dos meses, incluso hasta morir, “infectados” por un extraño episodio de histeria colectiva. El suceso histórico es el punto de partida de la obra teatral La plaga del baile, que el grupo Arrastra Teatro estrena en Guayaquil.
Con la propuesta, el colectivo ganó en noviembre la tercera Maratón del Teatro, concurso para nuevas agrupaciones organizado por el Teatro Sánchez Aguilar. Tras seis meses de preparación el grupo presenta la obra este 12, 13 y 14 de junio. Las funciones son a las 19:00 en la Sala Zaruma del Teatro de la avenida a Samborondón.
“La epidemia de baile de Estrasburgo es un hecho histórico muy curioso, parece irreal. Cuando comenzamos a investigar resulta que estos raptos fueron algo recurrente en la época medieval”, explicó Miguel Palacios, uno de los integrantes del grupo, que construyó la dramaturgia de la obra de forma colectiva.
La extraña peste llamó la atención del colectivo que empezó a relacionarla con su paso por la Academia. Los primeros integrantes se conocieron en el 2012 cuando estudiaban teatro en el Instituto Tecnológico de Artes del Ecuador (ITAE), una carrera de la que luego se ‘autoexiliaron’.
Pero según Andrea Freire, otra de las integrantes, el tema principal son las relaciones de poder y la forma “absurda” como el poder lidia con los problemas. “Es una crítica al sistema, porque el mundo no ha cambiado tanto”.
En el caso de Estrasburgo las autoridades respondieron a la peste de baile construyendo plataformas con pisos de madera, contratando a músicos y bailarines que acompañaran a los enfermos en un rapto que empezó con una mujer y al cabo de un mes afectaba a 400 ciudadanos.
“Más que en el hecho de la plaga, nos fijamos en lo que estaba sucediendo alrededor. Empezamos a imaginar antecedentes y consecuencias”, explica Palacios, que le adjudica el episodio a la hambruna y que dice que la pieza teatral se desarrolla en un universo donde pasado y presente dialogan permanentemente.
El colectivo lo integran además Andi Guillén, Mary Pacheco y Sergio Mendoza, con edades de entre 20 y 27 años. Arrastra Teatro nació en febrero del año pasado y por meses el colectivo ensayó en la concha acústica del parque de la Kennedy, en el norte de Guayaquil.
El premio del Teatro Sánchez Aguilar, que les otorgó asesoría y un espacio para ensayos, les permitió montar La plaga del baile, una obra de 60 minutos, que trata sobre la locura y la muerte de una forma tragicómica.